Un examen público de 16 días para Carlo Ancelotti y los suyos

El próximo 14 de abril, el Real Madrid disputará el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Atlético. Será en el Vicente Calderón, escenario de uno de los últimos descalabros del equipo en este negro 2015 (y probablemente el más doloroso). Aquel 4-0 disparó todas las alarmas, las mismas que siguen ahora mismo en rojo después de casi cuatro meses de caída en la que los blancos han perdido la posibilidad de ganar un título (la Copa) y se han complicado otro hasta el extremo, La Liga, después de tener todo a favor.

Pese a la mejoría exhibida contra el Barça la recuperación desde el plano de los resultados no se produce y el margen de error se estrecha. También para Carlo Ancelotti. El italiano suscita un debate en el madridismo. Justo o injusto según la opinión de cada uno pero real, al fin y al cabo. Como todo técnico que ocupa el banquillo del Bernabéu al final serán los resultados los que juzgarán en un alto porcentaje sus posibilidades de futuro en la entidad, le guste a quien le guste. Y esa fecha mencionada, el 14 de abril, será el punto de partida de algo más de una quincena en la que el panorama del equipo y su jefe quedará totalmente definido de cara a junio.

Para afrontar ese reto, Ancelotti podrá contar, previsiblemente, con James. El regreso del colombiano será una magnífica noticia pero un problema al mismo tiempo para él, tal y como explicamos ayer en Don Balón. 'Carletto' señaló a la BBC e Isco como "intocables" y ahora tendrá que elegir entre siete jugadores para seis posiciones, con un dilema táctico añadido: Mantener el 4-3-3 con Cristiano, Bale y Benzema y quitar a un futbolista de entre Kroos, Modric o el malagueño, mantener al cafetero como suplente de momento o quitar a uno de sus estiletes arriba para dar entrada a cuatro centrocampistas. Todas las miradas apuntan al de Arroyo de la Miel, idolatrado por el Bernabéu. Como argumento a favor para el entrenador puede jugar su bajón físico de las últimas semanas, que se hizo patente en el Camp Nou. Pero aun así no sería una medida muy popular.

Así pues, de esa trascendental decisión de Carlo y lo que suceda entre la ida frente a los rojiblancos y el 30 de abril, fecha en la que, según algunas fuentes, Ancelotti podría empezar a ser sondeado para afrontar nuevos retos (se habla del Manchester City), saldrá la radiografía a través de la cual se empezará a reconfigurar el equipo blanco de cara a la temporada 2015-2016. Antes del Atlético habrá partidos en los que los onces iniciales no sean tan susceptibles de debate (Rayo y Eibar) y James probablemente no estará aún disponible contra el Granada. Por otro lado, pese a que los rumores sobre el interés del City o de otros clubes de Europa por el italiano sean o no ciertos, Ancelotti tendrá difícil sobrevivir si cae en la Champions y al mismo tiempo no se ha producido una remontada en la Liga. Serán dieciséis días de pasión.