Fue el error de Simeone: Luis de la Fuente se carga a Morata y regala un socio ‘top’ a Lamine Yamal
Con el gran arranque del español, puede haber un cambio importante en la posición de nueve
La delantera de la Selección Española hace tiempo que no acaba de estar del todo cerrada. Si bien, es cierto que Lamine Yamal y Nico Williams se presentan como los dos extremos titulares del combinado nacional, la punta de lanza de La Roja es un puesto que, desde los tiempos de David Villa no se cubre con certeza. En este sentido, con las dudas que deja Álvaro Morata, Luis de la Fuente se podría plantear la inclusión de un nuevo delantero como Samu Omorodion.
El flamante nuevo delantero del Porto, llegó procedente del Atlético de Madrid, en una operación que dejará absolutamente retratado a Diego Simeone y a todo el conjunto colchonero al no ver qué se perdían al dejar salir al español. Pues, pese a que las cláusulas de compra en la operación que mandó a a Omorodion a Porto, no son obligatorias, sí que serán rapidamente activadas por el conjunto luso, que ya ve en el español, a su nuevo Radamel Falcao.
Y es que, la realidad es que el rendimiento de Omorodion en O Dragao está siendo digno de mención y para que Luis de la Fuente lo tenga muy en cuenta de cara a la próxima convocatoria de la selección absoluta. Pues, el de Melilla ha sido capaz de sumar tres goles en los tres partidos de liga que ha disputado y otro en su debut en Europa League. Es decir que Omorodion va a gol por partido con el Porto.
Un nueve diferente a todos
Si bien, correr a la contra nunca ha sido el principal estilo de La Roja, la presencia de un nueve como Omorodion, con la capacidad de atacar los espacios gracias a su potencia y velocidad y que, además, es todo un depredador cuando se trata de estar dentro del área, puede ayudar mucho a Luis de la Fuente, pues, en aquellos partidos donde la presión sea más alta, contar con un delantero que pueda amenazar la espalda, es un as que antes no tenía la selección. Además, con Lamine Yamal al lado, la vida del nueve siempre es más fácil.