Todas las interioridades de la renovación de Sergio Ramos por el Madrid

¿A qué se compromete el jugador? ¿Y el club? ¿Qué ha perdido el sevillano por mantenerse en la casa blanca?

Las cifras de la renovación de Sergio Ramos -que se hará oficial cuando el Real Madrid regrese a la capital de España- se han hecho más o menos públicas a través de la prensa y vienen a resumir que el futbolista ha conseguido lo que quería o, al menos, en parte: Acceso a casi 10 millones de euros por temporada (9 más objetivos) y primer capitán en los próximos cinco años, con contrato hasta 2020.

 

Ambas partes salen victoriosas de algún modo. El jugador obtiene el reconocimiento que buscaba y el Real Madrid apaga un inciendio que amenazaba con quemar las bases del club justo después de la traumática salida de Iker Casillas. Además, se asegura la continuidad de un central que, por otro lado, no tiene recambio ni parecido en el mercado.

 

Tampoco 'ata' al futbolista al club para evitar salidas como la de Iker. En eso ni Ramos ni el Madrid actuarán igual. Los dos bandos ya dejaron claro que, fuese este verano o dentro de ocho años, el matrimonio no terminará como han acabado otros tratándose de jugadores leyenda. No más filtraciones interesadas ni ataques por lo bajo. Tampoco un 'enquistamiento' del jugador en el equipo.

 

Sergio pierde dinero con la oferta del United (unos 2-3 millones de euros por temporada) pero se queda en el club de su vida, con más galones y con un mejor sueldo. El Madrid no pierde a su nueva 'bandera' nacional, así que en cierto modo todos ganan algo. Eso sí, ahora tocará lidiar con el pequeño o no tan pequeño sector de la grada que le tache de pesetero cada vez que cometa un fallo. Será también labor de ambos, club y jugador, trabajar para que esas voces no aumenten.