Pedro y Adriano están dispuestos a forzar la máquina para irse del Barça

Pedro Rodríguez y Adriano Correia lo tienen completamente decidido: piensan dejar el Barça este mismo verano. Su técnico, Luis Enrique, ya les ha lanzado una suerte de ultimatum: si quieren marcharse, tendrán que pagar la cláusula de rescisión. El club azulgrana no puede inscribir nuevos jugadores hasta enero de 2016 por la sanción de la FIFA que pesa sobre la entidad. De ahí las reticencias a deshacerse de más efectivos. Los dos jugadores, no obstante, confían en que podrán reconducir la situación. Incluso, si es necesario, adoptarán una posición de fuerza. Los dos ya han confesado dentro del vestuario que piensan marcharse. Así lo ha publicado Mundo Deportivo.

Adriano ya ha llegado a un acuerdo con la Roma. Durante la temporada pasada apenas tuvo oportunidades de jugar y el club italiano le ha prometido que tendrá un papel fundamental en sus esquemas. El club, no obstante, insiste en remitirse en su cláusula de rescisión, cifrada en 90 millones de euros. Una cantidad que el conjunto giallorosso no está dispuesto a asumir. Las negociaciones por el traspaso del lateral prometen ser muy arduas. En el caso de Pedro, el jugador también quiere tener más minutos, con el objetivo de no perder el tren de la próxima Eurocopa. El único equipo que, ahora mismo, parece dispuesto a darle acomodo es el Liverpool. Como en el caso de Adriano, el Barça también remite a los interesados a su cláusula, aunque en el caso del tinerfeño ésta bajó de 150 millones de euros a 30 millones con la ampliación y mejora de su contrato. Los reds, con todo, no quieren pagar tanto, a pesar de haber vendido este verano a Raheem Sterling al Manchester City por 68 millones de euros. En su caso, también se prevé que las conversaciones serán muy largas.

El Barça no quiere dejar escapar ni a Adriano ni a Pedro. Pero, vista la actitud de ambos, las opciones de que consiga retenerlos parecen ahora mismo muy escasas.