"Ancelotti va camino de dejar la etapa Queiroz en una broma"
Hace once temporadas, el Real Madrid sufrió uno de los mayores descalabros de su historia. Los síntomas ahora son incluso peores
"A Ancelotti se le está quedando cara de Queiroz". O : "Ancelotti va camino de dejar la etapa Queirzo en una broma". Con estas frasse resumía un directivo al término del partido ante el Schalke el tránsito por el que diambula este Real Madrid y su técnico. El Real maravilló en la primera parte de la temporada, pero desde el Mundial de Clubes está metido en un crisis física y de resultados. En la temporada 2003/2004, con Queiroz en el banquillo, el equipo blanco hizo un fútbol exquisito y mantuvo el liderato hasta la jornada 31. Sin embargo, la final de Copa ante el Zaragoza supuso un shock para aquella plantilla. Fue el preludio de lo que sería un horrible final de campaña. El Madrid terminó cuarto en Liga y eliminado de la Champions League por el Mónaco de Morientes. En enero de 2004 se hablaba de triplete y solo 100 días después el apocalipsis había llegado al Bernabéu. Once años después, dos técnicos diferentes, pero con demasiados puntos en común.
"En la cúpula del Real Madrid empiezan a temer el ‘síndrome Queiroz'. Cuando un entrenador hace más política que otra cosa se acaba pagando, Ancelotti no hace cambios porque no cree en la plantilla. La directiva cree que Ancelotti no puede cambiar la situación y que, o lo cambian los jugadores o esto no va a acabar bien. Se han encendido las alarmas, en el club están en situación de emergencia", afirma una fuente informada del Madrid.
Una dirigencia, la blanca, que considera que Ancelotti ha planificado mal la temporada. "Creen que Ancelotti no es capaz de solucionar el problema, los jugadores son los que deben sacar al equipo del socavón en el que están metidos. Se considera que la planificación de la temporada no ha sido la adecuada y se le dijo a Ancelotti, pero salvo que sea un genio y haya planificado una época de recuperación para resurgir al final de Liga, estaríamos hablando de un error de planificación", asegura la misma voz, que abunda: "Ancelotti le ha confesado al presidente que ya no sabe que hacer. Esta superado por la situación. Perdido". "El vestuario se le ha ido de las manos".