Benítez y Cristiano tendrán que aguantar sus manías en el nuevo Real Madrid
Por lo que empieza a verse en los entrenamientos, el portugués estará más 'dirigido'
Las sesiones de entrenamiento de Rafa Benítez en Australia están dando bastante de qué hablar sobre sus futuras intenciones en el Real Madrid. Desde luego son más tácticas y menos dejadas a la inspiración que en tiempos pasados en el equipo y además en las mismas practica diversos 'experimentos' con los futbolistas que dan lugar a todo tipo de especulaciones periodísticas, ideales para medios y aficionados tanto a la hora de generar debate sano como ilusión de pretemporada.
De lo más comentado y debatido está el rol que tomará Cristiano Ronaldo dentro de este nuevo Real Madrid. Parecía que el mensaje del club era darle más galones a Gareth Bale apartándole de la banda derecha y en parte así va a ser, pero siempre con el portugués como primera espada del grupo. En la entidad no son tontos y saben que aún es CR7 el que marca las diferencias. Eso sí, dada la experiencia con el futbolista en las últimas temporadas y su actual estado de forma, parece que existe una intención de hacerle ver que tendrá que ir cambiando su mentalidad poco a poco.
Desde 2009, año de su llegada a Madrid, Cristiano lo ha jugado todo. Nunca ha entrado en rotaciones (entre otras cosas, porque poquísimas veces las ha habido en el Madrid en las últimas campañas). Son incontables las veces que se ha reclamado que descansara en partidos de poca enjundia o los choques en los que forzó para jugar simplemente por engordar sus estadísticas goleadoras, defender un pichichi o tratar de cazar a Messi en la tabla de anotación. Se adivina que el nuevo cuerpo técnico piensa en su edad y en cómo ha ido acabando las últimas temporadas, la mayoría de las veces por debajo de sus prestaciones habituales, machacado físicamente y con la rodilla maltrecha. Y siempre se ha notado ese bajón suyo en cuanto a capacidad de respuesta del equipo en los momentos decisivos.
Por ello, Rafa Benítez sigue insistiendo hasta ahora en hacer modificaciones en el día a día de CR7 en los entrenamientos. En la última sesión comenzó donde más le gusta, la izquierda, para pasar después a jugar de delantero. Muchos reclaman esta nueva posición para el luso ya que haría que tuviera menos desgaste físico. El pasado curso ya abandonó el costado durante buena parte de la temporada para jugar casi de '9' junto a Benzema. Lo hizo porque en muchas ocasiones no llegaba bien físicamente para ser extremo. Por otro lado, el nuevo técnico le aparta en determinados momentos del trabajo grupal para endosarle un plan específico de puesta a punto y de velocidad.
El mensaje es claro: Cristiano se dosificará más, variará sus demarcaciones según el momento para estar más fresco durante todo el año y medirá sus esfuerzos para no llegar roto al tramo final de la campaña. Incluso puede que rote, algo que no le gusta. El Madrid quiere estirar su vida deportiva lo mejor posible y para ello tendrá que lidiar con el enorme caracter competitivo del jugador, que no siempre se tomará estas decisiones con alegría. Es uno de los caballos de batalla de Benítez para este año, porque tampoco conviene soliviantar en exceso a la estrella. Ambos tendrán que 'tragarse' y comprenderse.