La planificación de la nueva temporada, aparcada hasta después del clásico

El Barcelona ha decidido centrarse en el trascendental partido ante el Real Madrid y dejar de momento de lado las negociaciones de posibles renovaciones, así como los hipotéticos traspasos

Los dos últimos tropiezos del Real Madrid han catapultado aún más si cabe la importancia del próximo clásico del Camp Nou. Si el Barcelona es capaz de imponerse en su visita al Eibar este fin de semana, llegará al encuentro de la máxima rivalidad de la Liga española con la posibilidad de darle un zarpazo casi definitivo a su eterno rival. Un triunfo los colocaría a cuatro puntos de distancia, pero los de Luis Enrique no pueden conformarse con una victoria cualquiera. No en vano, cayeron por 3-1 en su última visita al Bernabéu y necesitan ganar por lo menos por dos goles de diferencia para que, en caso de un hipotético empate a puntos al final de la competición, sea la diferencia general entre goles marcados y encajados lo que decida el campeón. A diferencia de en la Copa, en el caso de la Liga los goles marcados como visitante no tienen más valor que los anotados como local.

 

Al Barça sólo le vale ganar. Y si puede ser por dos o más goles, pues mucho mejor. De ahí que gran parte de la atención del conjunto barcelonista ya se encuentre prácticamente centrada en el clásico. Antes, desde luego, tendrán que jugar en Ipurúa y certificar la eliminación del Manchester City en la Champions, pero para los azulgrana el próximo 22 de marzo está señalado con una marca roja en el calendario. Tanto es así que, de momento, la planificación de la próxima temporada está por ahora aparcada. No va a haber movimientos hasta que se acabe el duelo ante el Madrid. Es decir, no se van a abordar renovaciones ni se va a hablar de posibles traspasos. En el capítulo de posibles altas, dada la imposibilidad de inscribir jugadores el próximo verano, no se prevé que haya muchos cambios. Al fin y al cabo, los movimientos deben mantenerse en el más absoluto de los secretos. Este año incluso más que en los anteriores.

 

Una vez dejado atrás el clásico, se volverá a hablar sobre la temporada que viene. Aunque el futuro de Dani Alves parece estar cada vez más y más lejos del Barcelona, no se descarta hacerle una última oferta que pueda decantar la balanza a favor de su continuidad. A la baja, pero lo bastante competitiva como para que el Manchester United y el PSG, los dos equipos que más desean contar con el brasileño de cara a la próxima campaña, vean finalmente frustradas sus aspiraciones. También se retomarían las conversaciones para debatir los posibles traspasos de jugadores que no están teniendo minutos y que podrían estar interesados en una salida, como Pedro, gran objetivo del Inter el próximo verano. No obstante, todo eso ahora tiene que esperar. El Madrid es lo más importante.