Bombazo con Gareth Bale en Estados Unidos: Lopetegui alucina (y se cuece un fichaje)

Ha llegado el momento. En pocas horas, el nuevo Real Madrid 2018-2019 echa a andar en Estados Unidos. Será ante el Manchester United de Jose Mourinho, sin Zinedine Zidane en el banquillo después de dos años y medio, y sin Cristiano Ronaldo por vez primera en nueve temporadas. Dos impactos cuya sacudida y efectos empezaremos a comprobar en cuanto el balón eche a rodar en Miami, a las 02:00 de la mañana de la madrugada del martes 31 de julio al miércoles 1 de agosto. Y parece que, para este debut de Julen Lopetegui como nuevo técnico blanco en pretemporada, el entrenador vasco ya tiene clara la línea de ataque con la que comenzará el partido.

Bale, Benzema y Vinicius. La BBV. Una nueva sigla para una nueva era, en la que todavía podría haber cambios. De hecho, los ha habido ya. Porque, durante estos días de trabajo, en Valdebebas y en Estados Unidos, Lopetegui se ha esforzado por convencer a los dos veteranos que tiene ahora mismo en su línea ofensiva de que confía en ellos. Bale y Benzema pasan a recoger el testigo dejado por Cristiano, tarea sin duda extremadamente complicada, pero para la cual el técnico tiene plena confianza en que ambos sabrán sobrellevarla.

Especialmente Bale. El galés ha estado siempre a la sombra de Cristiano Ronaldo desde que aterrizó en el Real Madrid en 2013. Por varios motivos, pero sobre todo, por la imposibilidad de jugar por su banda natural, la izquierda, ya que el portugués tenía copado ese costado. Es verdad que el propio Bale siempre ha dejado claro que su rol favorito es poder moverse con libertad por toda la línea de ataque y no quedarse estático en una posición, pero es que eso tampoco ha podido hacerlo demasiado durante cinco temporadas. Ahora, sin CR7, va a ser el referente de ataque, con Karim como principal escudero.

En cuanto a Benzema, se espera del francés que mejore sus números anotadores respecto a las dos últimas temporadas, y se pone como ejemplo su campaña 2015-2016, en la que, con Rafa Benítez primero, y Zidane después, marcó 28 goles en todas las competiciones oficiales, su segunda mejor marca en el Real Madrid después de los 32 que hizo en la campaña del título de Liga con Mourinho (2011-2012). Fue precisamnete Benítez quien le pidió que fuese más egoísta. Ahora podrá serlo sin cargos de conciencia. Y seguirá realizando ese rol de enganche con Bale que tan bien se le ha dado siempre con el propio galés y con Cristiano.

Lopetegui está tranquilo respecto al tema del vacío dejado por Cristiano Ronaldo en cuanto al potencial goleador que ha perdido el equipo. Cree que Bale y Benzema pueden dar ese paso adelante, y que, pese a su juventud, Vinicius está preparado para aportar. Y si llega un delantero centro, cosa nada descartable, en todo caso no será un perfil parecido al de Gareth o al que tenía el luso, hombres más de banda o no arietes natos, sino un '9' puro que complemente con el de Cardiff. Lo dicho: Bale es el nuevo crack de Julen. Y tanto es así, que en la entidad no se plantean fichar a nadie que pueda hacerle sombra de nuevo tras haberse marchado el portugués.