La jugada a tres bandas que acaba con Cristiano Ronaldo fuera del Real Madrid (con Neymar en el ajo)
En marcha la que puede ser la operación del verano
Este verano puede ser histórico. Grandes nombres del fútbol mundial tienen su futuro en el aire, y se podría producir más de un traspaso que revolucionara el panorama de este deporte. Son los casos de Cristiano Ronaldo y Neymar.
El portugués ya ha dejado claro su desencanto con el Real Madrid. Al luso le prometieron una revisión de contrato después de enfrentarse al PSG, pero no ha llegado. Cristiano sigue cobrando la mitad que Messi y menos que Neymar. No cree que sea lo justo, menos aún viendo su rendimiento en los últimos meses.
El caso de Neymar no tiene nada que ver con el dinero. El brasileño no se siente a gusto en el PSG. Desde que llegó al conjunto francés no ha levantado cabeza. Cayó en octavos de Champions y los títulos conquistados en el país galo le han dado absolutamente igual. De hecho, ni siquiera viajó a la capital francesa para celebrarlos junto a sus compañeros. Está desencantado y quiere un cambio de aires.
Y detrás de todo esto, el Manchester United. Los 'red devils' preparan la chequera para el próximo verano después de su pésima temporada. José Mourinho ya ha dejado claro que quiere a un líder sobre el terreno de juego, y el nombre que más factible ven en Old Trafford es el de Neymar.
El United ya ha iniciado los contactos con el entorno del brasileño, y la respuesta ha sido positiva. 'Ney' lo ve con buenos ojos. El Manchester estaría dispuesto a pagar los 400 millones que pide el PSG por desprenderse del '10'.
En París ya no ven tan mal la posibilidad de sacarse de encima a Neymar, sobre todo viendo el comportamiento que está teniendo el ex del Barça. Por un buen precio se puede negociar, y el recambio está claro: Cristiano Ronaldo.
El club parisino se lanzaría a por el portugués, dispuestos a convertirlo en el mejor pagado del mundo. Saben que a Cristiano le quedan dos o tres años al máximo nivel, y lo ven suficiente como para realizar una gran inversión. El luso no dará problemas: es un profesional como la copa de un pino. Además, en cuestión de márketing sería un auténtico golpe sobre la mesa.
Una operación complicada, sí, pero que cada día cobra más fuerza.