¿Pillería o fraude? La táctica de un portero coreano para detener penaltis

Una moda que, esperemos, no se exporte a otros países

Apunten el nombre de Lee Bum-young. Es el portero del Busan Ipark, de la liga coreana de fútbol, y tiene un método un tanto peculiar de afrontar los penaltis en contra. No crean que posee una técnica espectacular a la hora de parar penas máximas, pero sí practica una serie de 'pillerías' que le han hecho ser célebre en su país.

 

¿Astucia o ilegalidad? Si ven lo que Bum-young hace cuando van a lanzarle un penalti alucinarán. El guardameta aprovecha los instantes posteriores a la señalización de la infracción, cuando todos los futbolistas de campo de su equipo están rodeando al colegiado para protestar, y se marcha al punto de penalti, que empieza a destrozar. Literalmente. Golpea la cal con sus botas hasta aumentar notablemente el desnivel con el césped, de modo que cuando el futbolista del equipo contrario va a disparar, no encuentra un terreno en condiciones. El resultado lo pueden ver en el siguiente vídeo.

 

 

El problema es que los árbitros no vean lo que sucede. Suponemos que esto es una ilegalidad, pero imagínense si se exporta a Europa, donde los colegiados tienen por costumbre no reflejar en acta nada que no hayan visto. Por tanto, por muchas cámaras que recogieran esta rastrera práctica, los porteros que la usen podrían llegar a salirse con la suya. Sin duda no es un ejemplo de limpieza.