El Barça recibe informes negativos de un crack de La Masia

Otro joven y prometedor futbolista del club azulgrana corre el peligro de acabar dejando también la entidad barcelonista prácticamente por la puerta de atrás

Bojan Krkic es uno de los últimos ejemplos. Un joven y prometedor futbolista del Barça, aparente llamado a convertirse en toda una estrella del club azulgrana, no consigue cuajar del todo en el equipo y tiene que acabar dejando el club prácticamente por la puerta de atrás. Le pasó a Bojan, le pasó a Giovanni dos Santos, el que iba a ser el nuevo Ronaldinho y que ahora se está reconciliando con el fútbol en el Villarreal tras un paso con más pena que gloria por Inglaterra, y le pasó también a Nano, un atacante que se estrenó con el primer equipo azulgrana casi como un imberbe, al que muchos comparaban hace muchos años con Rivaldo y que no acabó de encontrar su sitio como barcelonista. Ahora, el nuevo jugador que se encuentra aparentemente sobre la cuerda floja es Gerard Deulofeu.

 

El talentoso delantero barcelonista ha encadenado esta temporada su segunda cesión consecutiva. Tras dar un buen rendimiento en las filas del Everton durante la campaña 2013-2014 y aterrizar el pasado verano de nuevo en el Camp Nou casi con el puesto en el primer equipo bajo el brazo, Luis Enrique prefirió finalmente que Deulofeu buscara minutos en el Sevilla. Las cosas, no obstante, no le están yendo demasiado bien últimamente al joven futbolista. Después de ver la vuelta de los dieciseisavos de final de la Europa League ante el Borussia Monchengladbach desde la grada, se quedó también fuera de la convocatoria para el duelo frente al Atlético de Madrid del pasado domingo.

 

Carles Rexach. miembro de la comisión técnica del Barcelona, incluso habría indicado en la polémica entrevista publicada el pasado fin de semana por el diario Regió7 que Deulofeu "se lo tiene muy creído". Un aparente exceso de confianza que podría estar pasándole otra vez factura en su actual etapa en el Sevilla. No obstante, la temporada todavía no ha llegado a su final. El joven crack forjado en la cantera azulgrana tiene tiempo de sobra para demostrar que su talento no es sólo flor de un día. Trabajar duro para recuperar la confianza de los técnicos es el camino.