Rafa Benítez le cuenta a Casillas los peligros de quedarse en el Madrid

El agente del capitán se pasó por el Bernabéu antes de la presentación del técnico

Rafa Benítez no se anda con historias. A la que pudo cogió el toro por los cuernos. Carlo Cutropía, agente de Iker, había pedido verse las caras con el nuevo técnico del Real y antes de la presentación del entrenador hubo un encuentro en el Bernabéu. La postura de Rafa -apoyada desde las alturas- fue tajante: Iker Casillas lo tiene mal.

 

El captián ha puesto sobre la mesa del Madrid dos opciones. Primera, pagar los 26 millones limpios que solicita para coger la puerta y desaparecer. O segundo, quedarse hasta final de contrato -2017- en el Real, una alternativa, esta última, lícita, pero que Rafa prefiere evitar.

 

Benítez ha dibujado a Cutropía el futuro que le espera en el Real si elige seguir. Casillas no volverá a jugar un partido más en la Champions con el Real Madrid. Será el suplente del que venga -De Gea-en la máxima competición de clubes y en la Liga. Las funciones del capitán quedarán reducidas a la Copa.

 

Este el mensaje que hace llegar el nuevo técnico a Iker. Su rol en el Madrid será residual. Sin galones. Como segundo de De Gea sí o sí. La participación de Casillas en Europa pasaría, únicamente, por lesión/sanción. Lo mismo que en la Liga. No habrá minutos ni en partidos de medio pelo. Su papel en el Real Madrid 2015-16 será el mismo que ha vivido y tragado Keylor Navas hasta la fecha en el Real a la sombra de Casillas.

 

Un planteamiento que escuece a Iker. El portero lleva pero que mal que se De Gea quien le pase la mano por la cara. No puedo con ello. Lo tiene cruzado. Si por Iker Casillas fuera no seguiría ni un día más en el Madrid. El guardameta está de acuerdo en que su etapa en el club blanco ha finalizado y no quiere continuar escuchando pitos en el Santiago Bernabéu. Pero el capitán tampoco va a ceder a presiones. Es una cuestión de dinero/orgullo: aceptar un rebaja en su salida, es aceptar que Pérez y compañía tienen razón. El problema de Casillas con el Real lo tiene el Real y no al revés. El capitán no quieres irse -no tiene nada mejor-. Es el club quien le invita a salir. Y en ese caso el razonamiento es lógico: sino me quieren, que paguen lo estipulado y listos.



Sea como fuere, la guerra fría entre Casillas y el Real Madrid apunta al verano. El presidente no cede ante las ansias económicas de Iker. Pero Rafa Benítez le ha pedido quitarle el problema del vestuario: pagar para sacarlo del Madrid.



Desde las alturas no entienden como un jugador que ha sido referente en el Madrid está ensuciando así su nombre en la entidad. La fama de pesetero corre como la pólvora por el club/grada que advierte que el gran drama para Iker es que ninguno de los grandes de Europa cubre sus expectativas económicas, por lo que es innegociable para el guardameta percibir íntegramente las cifras dispuestas con el Madrid.