Destapamos las cláusulas en el contrato de Rafa Benítez con el Real Madrid

El Real juega a la prudencia en su vinculación con el técnico madrileño

Adiós 'Napoli, hola Madrid. Así de simple. Fue dar portazo a Italia y abrir la puerta de regreso a España. El Madrid espera. Y espera con un contrato por dos temporadas con opción a una tercera. 

 

 “Espero que Florentino Pérez le haga un buen contrato a Benítez”, dijo sonriente Aurelio de Laurentiis, el presidente del Nápoles. No será el mejor que ha firmado el Real. Florentino no se quiere pillar los dedos con Rafa. El presidente no es un enamorado del madrileño, en su psique los nombres de Löw/Mouirnho siguen sonando con fuerza. Es por ello que la prudencia es la que ha marcado las negociaciones con el madrileño. Si las cosas van, se logran objetivos, es decir, títulos, la vinculación entre  las partes puede ser eterna. Ahora bien, y de entrada, el Madrid ha querido guardarse las espaldas. Un contrato de dos años con opción a uno más y con cláusulas por objetivos que dejarían al madrileño sin derecho a finiquito si el Real no cumple con lo establecido. El club se guarda en la manga un as: prescindir del técnico sin tener que rascarse el bolsillo a final de cada curso. La experiencia con Ancelotti ha servido de lección a los mandatarios blancos que quieren ver si el matrimonio Benítez/Madrid es tan prometedor como algunos quieren y apuntan. 

 

El otro detalle está en la ficha para el técnico. Nada de grandes cifras. Los contratos de crack se ganan en el campo, con títulos y resultados. De entrada, Rafa percibirá unos cuatro millones de euros, medio millón más de lo que percibía en el Nápoles,  la mitad de lo que se llevaba Mourinho -9 millones- y muy por debajo de  Ancelotti -7,5 'kilos'-. Unas cifras que se revisarán -establecido por contrato- si llegan los éxitos.