La interioridades del Real Madrid: los movimientos de Bale en la sombra

El galés maneja el doble juego como pocos en el vestuario blanco

Gareth Bale no es lo que aparenta. El galés utliza su aparente gesto tímido como pocos. Gareth trabaja a espaldas del grupo. Tiene contacto directo con las alturas y expone sus dramas con soltura. Apunta culpables y pide soluciones. La conclusión de Gareth Bale en este 2015 es clara: mientras esté Crsitiano Ronaldo en el Madrid su papel va a seguir siendo secundario, residual. Dos gallos en el mismo gallinero terminan a picotazos y esto es lo que está pasando. Un argumento que ha trasladado a la figura de Carlo Ancelotti, el otro gran responsable, a su entender, de que el madidismo no esté viendo loa mejor de Gaerth.

 

Florentino Pérez pidió a principios de año echar un capote al galés para que su adaptación al Madrid y Madrid fuera mejor y la respuesta de CR7 fue una: indiferencia. Los deseos del presidente, que fueron acompañados de un "tenemos que ayudar a Bale para que sea el Balón de Oro del futuro" fueron una puñalada más en la psique de un Ronaldo que no comulga con los mismo que destina el 'presi' a Gareth. Un pensamiento que es compartido por una amplia mayoría del grupo que no le encuentra la gracia al galés, ni el campo, ni fuera de él.

 

No opina así Pérez. Para Florentino el futuro del Madrid se construye sobre Bale. Y lo escucha. El ex del Tottenham ha hecho llegar al presidente del Madrid un mensaje claro: está mucho más cómodo en el campo jugando por banda, con un 4-4-3 que con Cristiano Ronaldo en punta, como pasó en Turín. Bale, cuando juega como delantero debe estar más pendiente de los movimientos que hace el portugués en ataque que en los suyos propios y eso conlleva que no tenga el protagonismo que todo el mundo espera. Eso, sin olvidar que sigue intentando cumplir con sus responsabilidades defensivas que le pide Ancelotti. En banda, tiene más libertad para hacer su juego, para brillar más porque no tiene que estar constantemente pendiente de lo que hace Cristiano que está en la otra banda.

 

 

Ancelotti también le molesta

Asimismo, la opinión de Gareth hacia Ancelotti tampoco es la mejor. Cree que con el italiano el vestuario está en manos de Casillas, Ramos y CR7. El perfil que traslada el galés de Carlo es el de una persona manipulable que responde a los deseos de los tres. Una idea que comparte a pie juntillas con el presidente que tiene al italiano enfilado desde Lisboa. El galés, además, le ha ido dando nuevos argumentos para finiquitarlo: acepta las críticas que ha recibido, pero cree que son injustas porque él no ha hecho otra cosa que cumplir las órdenes de Carlo Ancelotti, estar atento al repliegue defensivo, ser solidario con el lateral de la banda derecha y también con los centrocampistas. La conclusión de Gareth es clara: Carlo no está sabiendo sacar lo mejor de él. Ni del equipo. Su salida, en opinión de Gareth, era la mejor opción para construir un nuevo Real. Lo tiene a tocar.