Vitolo (y Simeone) montan un lío en el vestuario del Atlético con una víctima inminente
El Cholo planea cambios en las jerarquías de la plantilla colchonera.
El fichaje de Vitolo ha renovado la ilusión de la plantilla del Atlético de Madrid y, en especial, de Simeone respecto a la próxima temporada. Parece que el músculo de la entidad respecto a conseguir fichajes importantes finalmente existe, y si bien el Cholo no va a poder disfrutar de ninguna incorporación hasta el segundo tramo del curso, sí que está viendo que el club está realizando un esfuerzo por contentarle. Y eso es mucho más de lo que se ha hecho en varios de los años anteriores en su etapa en el conjunto rojiblanco.
Ahora bien: firmar a Vitolo va a tener sus consecuencias, y seguramente sea en forma de alguna baja sonada. El canario viene a ocupar una demarcación en la que el equipo tiene a un especialista, Yannick Carrasco, que ha sufrido muchos altibajos y ciertos problemas con el cuerpo técnico por su mal carácter y sus tendencias a la indisciplina. En varias ocasiones de la pasada temporada se dio por hecho que el belga se iría este verano. Y aunque la operación está parada debido a la sanción FIFA, la llegada del internacional español puede cambiarlo todo.
Son muchos los grandes de Europa que han llamado a la puerta del Atlético de Madrid preguntando por la situación de Carrasco en los últimos meses: desde el Inter de Milán al Manchester United, pasando por el Bayern de Múnich o incluso se dijo que el Barça. Pero en cualquier caso, Simeone tendrá que lidiar con un problema importante en el vestuario: de un lado, convencer a la plantilla de que permanezcan en el equipo debido a que no habrá incorporaciones en el primer tramo del curso; y de otro, lidiar después con una ‘superpoblación’ en la segunda mitad del mismo.
Carrasco y, en menor medida, Correa, son los dos grandes damnificados por el fichaje de un Vitolo que entrará como un elefante en una cacharrería a partir de las Navidades. Y veremos en qué tipo de vestuario, ya que las cosas cambian mucho de un mes a otro. Buena noticia, sí, pero todavía está por ver cómo ordenará Simeone todo este lío en una campaña ya de por sí agitada, con el estreno del Wanda Metropolitano.