Wenger provoca el primer mosqueo de la pretemporada con los fans del Arsenal

El técnico francés empieza a ponerse vendas.

Tras quedarse fuera de los puestos de Liga de Campeones por primera vez en mucho tiempo, el Arsenal de Arsene Wenger ha cambiado su tradicional estrategia en el mercado de fichajes. La incorporación del delantero Alexandre Lacazette ha costado casi 60 millones de Euros, y el equipo londinense podría desembolsar otra cantidad estratosférica en las próximas semanas para fichar a Thomas Lemar, centrocampista del Mónaco y una de las grandes revelaciones jóvenes de la temporada pasada.

 

Entre otros motivos, Wenger se ha visto obligado a tirar de las arcas del club ante el grave peligro que corrió en su puesto en la última temporada. El creciente descontento que la afición del Arsenal viene mostrando con la gestión del técnico francés con el paso de las temporadas ya hizo que el entrenador se tambaleara el pasado curso. Y ahora las expectativas son máximas, dentro de que los 'Gunners' no jugarán la máxima competición Continental.

 

Por eso, no han gustado demasiado las primeras palabras del galo en el inicio de la nueva pretemporada, que de alguna manera han venido a calmar los deseos de ganar títulos por parte de la hinchada inglesa. Casi poniéndose vendas antes de empezar, Wenger fue escéptico a la hora de hablar de éxitos: "Queremos ganar trofeos, pero no puedes vivir dentro de un club pensando que quieres ganar el próximo trofeo y si no lo haces, has perdido".

 

"El club tiene una base más sólida que eso. A nivel personal quiero ganar cada partido, y cuando perdemos me pongo furioso y triste, pero eso es parte de ser entrenador. He tenido la suerte de tener una larga carrera y estoy totalmente comprometido con el Arsenal. Hacerlo bien significa, por supuesto, ganar la Premier League, ojalá la Champions League también... pero creo que he permanecido tanto tiempo en el Arsenal como para que para mí, lo primero sean los valores del club. Lo más importante es saber quiénes somos, y lo que es importante para nosotros", prosiguió.

 

Sin duda, un mensaje que dejará con el ceño fruncido a los fans del Arsenal, que apenas ha conquistado grandes trofeos en la última década.