Pep Guardiola incluye a Pedro en su revolución pendiente en el Bayern

Pep Guardiola ha superado con éxito la crisis de la eliminación del Bayern Múnich de la Champions League por segundo año consecutivo en semifinales. Las voces críticas hacia su trabajo se han ido acallando y tras la tempestad ha llegado la calma al club muniqués. Incluso Karl-Heinz Rummenigge, de acuerdo con Franz Beckenbauer y las fuerzas vivas del entorno del club, ha decidido que lo mejor para el futuro del Bayern Múnich es que Pep Guardiola siga en el banquillo del Allianz Arena y, a ser posible, ampliando la duración de su contrato, que expira en junio de 2016.

Y Pep, como ya es habitual en él, les ha respondido que ya les dirá algo. Seguramente en febrero del próximo año, tal y como sucedía en el Barcelona cuando renovaba de año en año. Pero hay más. También le ha dicho a Rummenigge que para seguir en Múnich quiere manos libres para llevar a cabo la revolución pendiente, algo que ya quiso hacer en el Barcelona, eliminando de la plantilla a cinco de sus pesos pesados. Parece ser que en el Bayern tendrá más suerte y Rummenigge le ha dado carta blanca para que decida las altas y las bajas de acuerdo a sus gustos.

Se producirán bajas sonadas de futbolistas ilustres que figuran en la lista de jugadores más cotizados del mundo. Y también altas que sorprenderán. Guardiola ha confirmado a su entorno próximo que este Bayern de las estrellas necesita renovarse para dejar paso a un Bayern menos glamouroso pero más trabajador como equipo, lo que quiere decir que Pep no va a buscar en el mercado a las estrellas más cotizadas para renovar su plantilla. Sí han trascendido dos nombres que tiene in mente para reforzar a su equipo. Se trata del barcelonista Pedro y de David Silva, actualmente en el Manchester City y del que en las últimas horas se ha dicho que podría regresar al Valencia. Pep ya lo quiso fichar para el Barcelona durante su etapa en el Camp Nou y ahora volverá a la carga con él.