Sergio Ramos pone en su sitio a James Rodríguez con un broncazo bestial en el Real Madrid

El capitán pega un puñetazo sobre la mesa

Stop. Sergio Ramos marca perfil. El calentón de James Rodríguez con el cambio de Zidane en Leganés no ha gustado un pelo en el Madrid.

 

 

Ni a Zidane, que se mordió la lengua en las preguntas posteriores al desafío del colombiano, por el bien del Madrid. Ni en las alturas, dónde ya no encuentran argumentos para defender la continuidad del ‘cafetero’. Ni en el vestuario.

 

Sergio Ramos ejemplificó el malestar del grupo con un bronca de las que marcan un antes y un después. El capitán no permite un solo escándalo en la caseta. Y menos aún que los intereses personales pasen por delante de los del Real.

 

El equipo se juega el ser o no ser en la temporada y Ramos marca perfil. Con James llueve sobre mojado. El ‘10’ antepone sus problemas al Real con shows que ponen en duda la unidad del vestuario.

 

Ramos, ni el equipo, va a permitir una niñería más. Morata, Isco, Asensio, Kovacic y compañía son el ejemplo que el grupo pone ante Rodríguez: jugadores que entran y salen del once sin aires de estrella. Ni espectáculos. Primero el Real Madrid.