Jorge Mendes 'le hace el lío' a Florentino Pérez (peligra un crack del Madrid)

El súper agente portugués tiene muchos intereses este verano en la casa blanca.

El Real Madrid deberá resolver varios dilemas que lleva tiempo arrastrando este verano, cuando finalice el periodo de sanción impuesto por la FIFA sin poder fichar, algo que ya sí podrá hacer en el próximo mercado estival. La portería, el centro de la defensa con el futuro de Pepe o encontrar recambios de jugadores como Marcelo son algunas de las operaciones a las que deberá enfrentarse Florentino Pérez, que también tiene entre manos la posibilidad de firmar algún jugador estrella para renovar la ilusión de la afición.

 

 

Pero todo eso implicará salidas, y seguramente alguna sonada. Son varios los jugadores de la primera plantilla cuyo rol en el Madrid actual de Zidane no se corresponde con los minutos que querrían tener, y que seguramente tendrían en muchos otros grandes clubes de Europa. Morata, Isco o James Rodríguez están en duda respecto a su continuidad por este motivo y es tarea del Real Madrid decidir qué hacer en cada caso, con un dilema especial referente al malagueño y el colombiano.

 

 

Parece que los dos juntos no podrán seguir en el Real. Han convivido durante dos temporadas, pero se quitan el sitio el uno al otro. Un sitio que, además, en principio no tiene ninguno, ya que las tres plazas son para Modric, Kroos y Casemiro. Y la irrupción de Asensio esta campaña ha repartido todavía más los minutos. Es inviable. Por ello, uno saldrá en julio. Y a día de hoy parece que será el andaluz, que tiene ofertas en Inglaterra y sobre el que pesa la sombra del Barça.

 

James espera esa noticia para renovar su contrato. El de Cúcuta ha rectificado después de sus declaraciones el pasado mes de diciembre, en las que afirmaba no tener decidido seguir en el Madrid. Ahora le ha jurado fidelidad a la entidad merengue y ha mejorado sus prestaciones sobre el césped, pero al mismo tiempo reclama un gesto por parte del club. Cuentan desde Diario Gol que James pedirá una renovación al alza de parte de su agente, Jorge Mendes, cuando se consume el traspaso de Isco. Pero si esto no es así y la decisión es desprenderse del cafetero o no se acepta esa subida, su salida será a la baja. Su cotización ha bajado de un tiempo a esta parte, y es una forma de presionar al mandatario blanco para que se lo piense dos veces antes de decidir. El agente luso juega sus cartas.