Zidane le para los pies a Gareth Bale (¡ojito a Cristiano Ronaldo!)
El galés envuelve una de las mayores incógnitas a resolver de forma inminente en el Real Madrid.
Todo hace indicar que Gareth Bale está listo para regresar a los terrenos de juego tras casi 90 días sin competir, pero por ahora Zinedine Zidane le ha parado los pies. El técnico francés ha tenido que interceder para convencer al galés de que no fuerce ante el Nápoles, cosa que quería hacer. No conviene meterle directamente en un choque de tanta exigencia. Por tanto, todo hace indicar que el extremo tendrá minutos ante el Espanyol el próximo sábado, pero no estará ante los italianos o, si está, será para verlo desde el banquillo.
Así lo desveló Eduardo Inda en el Chiringuito, revelando una conversación clave entre el técnico francés y el jugador que ha calmado al '11' madridista. "Gareth Bale quiere jugar ante el Nápoles pero Zidane le ha dicho que le va a reservar para el partido ante el Espanyol de este fin de semana. Salvo sorpresa incluso ni le van a convocar para el partido del Nápoles y si le convocan sería para no jugar. Tiene el físico del mejor Bale de siempre", explicó.
Bale ha cumplido con creces todos los plazos de su recuperación e incluso vuelve antes de lo esperado. Con su regreso, la enfermería del Real Madrid se vacía, a la espera de que no suceda nada en los próximos partidos. Podría ser la primera vez en toda la temporada en la que Zinedine Zidane empiece a poder contar con absolutamente todos sus jugadores para cada partido del equipo, justo en el tramo de mayor concentración de encuentros del curso.
La afición madridista y muchos analistas esperan con ansia el regreso de Bale para ver qué hace Zidane. El paso de la temporada y la evolución natural de Cristiano Ronaldo por su estado físico han convertido al portugués en casi un delantero centro en los últimos meses. Por tanto, podríamos empezar a ver al galés acostado en la banda izquierda casi por primera vez desde que viste la elástica blanca, lo que muchos consideran su espacio natural. Además, al convertir a Ronaldo en un rematador nato, el emplazamiento de Gareth en banda para proporcionarle centros sería una maniobra táctica muy esperada.