Así se cocinó la rajada de Piqué en San Mamés: el capo que autorizó a Gerard

El vestuario azulgrana era un hervidero al término del partido ante el Athletic

El equipo era una furia. Fernández Borbalán pitaba el final del primer tiempo e Iniesta, Messi, Piqué, Busquets y compañía se comían al árbitro. El calentón de los azulgrana con el mal hacer de Borbalán fue la comidilla durante y después del partido.

En el vestuario, con el encuentro finiquitado, Andrés Iniesta, capitán, respaldado por Busquets/Messi definió el discurso unísono del equipo que canalizó Gerard Pqiué con su rajada ante los medios y tuits en contra de medios informativos nacionales.

 

"El penalti a Neymar ha sido clarísimo y el que me ha hecho Gorka a mí, también. Pero ya sabemos cómo funciona esto. Ya vimos lo que pasó ayer en el Sevilla-Madrid... en la línea de los últimos tiempos. Nosotros queremos jugar a fútbol y no a la ruleta, que es lo que provocan estos arbitrajes", espetaba el catalán.

 

Unas afirmaciones compartidas por cada miembro del vestuario que ante la pasividad de Luis Enrique ha decidido tomar el mando.

 

En el grupo afirman que llueve sobre mojado. No ven casuales las ayudas al Madrid y avisan de que este año va a ser casi imposible revalidar título en Copa/Liga.