El precio (real) de James Rodríguez para salir en el mercado de invierno
Florentino Pérez tasa al colombiano. No piensa regalarle y menos después de su 'rajada' en Japón.
La suerte está echada. Parece que a James Rodríguez no le va a salir nada bien esa especie de órdago a grande que realizó en la zona mixta del estadio de Yokohama, ante la prensa española, para poner en duda su continuidad en el Real Madrid: “Quiero quedarme, pero quiero jugar más. No puedo asegurar que siga, tengo ofertas y siete días para pensar”. Unas palabras inesperadas (por el momento concreto, tras ganar un título) y nada adecuadas. El capitán Ramos le echó la bronca en público, existe un cabreo notable en el seno de la entidad… y ya hay un plan de acción en consecuencia.
Los compañeros de Diariomadridista retratan la situación en caliente, nada más producirse el desastre, en forma de reacción airada de la entidad al conocer la ‘rajada’ del de Cúcuta: “Quien no quiera estar en el Real Madrid, que se vaya; ahora bien, que alguien ponga los 500 millones de su cláusula”. Vamos, que en la casa blanca se han hartado de este tipo de salidas de tono de James (porque no es la primera) pero tampoco piensan claudicar así como así ante la ‘pataleta’ del ‘10’.
Fuera de esta reacción primaria de enfado monumental, lo cierto es que las puertas del Real Madrid se han abierto para James (ahora sí), pero no a cualquier precio. No se venderá al futbolista si no llega una oferta acorde al valor que consideran en la entidad de Concha Espina que tiene, y que satisfaga el enorme esfuerzo económico que el Madrid hizo por el jugador hace dos temporadas. Esto es, entre 60 y 80 millones de Euros, la cifra que se pagó por Rodríguez.
Pretendientes no van a faltar. James es un hombre todavía muy cotizado en el mercado. Lo que igual sí sucede es que, conscientes de la ‘patata caliente’ que empieza a tener encima el Real Madrid, los grandes de Europa intentan aprovecharse ofertando a la baja. Si es así, a James le quedan muchas tardes de domingo en la grada o en el banquillo… o jugando, si es que se retracta, recapacita, calla y vuelve a esforzarse para ganarse un hueco. Pero a diferencia de sus anteriores quejas en Colombia y desde la distancia, este desliz en Japón ha hartado y mucho al club. Puede haber sido su sentencia.