La crisis del Betis 'salpica' definitivamente a la dirección deportiva

Parece que la actualidad del Betis empieza a trascender un poco de Gustavo Poyet y a mirar hacia arriba en el escalafón, después de que todos hayan dado por hecho que el uruguayo se sentará en el banquillo, al menos, contra el Villarreal este fin de semana. Ahora los rumores se centran en el director deportivo, Miguel Torrecilla, quien apadrinó el fichaje del charrúa este verano.

 

Torrecilla, un veterano de la Liga en su papel de director deportivo y uno de los principales artífices del éxito del Celta de Vigo, club del que procede, hizo un trabajo enorme en el último mercado estival, tanto de salidas como de entradas en la plantilla. Armó un equipo nuevo en el que había puestas muchas expectativas, y con el que se estaba satisfecho. Sin embargo, ya se ha deslizado que, una vez más, el Betis tendrá que acudir a enero a solucionar los diferentes problemas que, o bien quedaron sin solventar en verano, o bien se han ido descubriendo.

 

Más allá de hablar de nombres, lo trascendente es el desgaste que la imagen de un hombre tan popular y bien reconocido como Torrecilla ha sufrido a ojos de los medios cercanos a la actualidad del Betis, ya que ahora mismo es de los pocos en el club que siguen defendiendo a capa y espada a Poyet, al menos por ahora y sin dudas. Además, es conocido por aprovechar bien el mercado de invierno. Sólo en cuatro de las siete temporadas en las que estuvo en el Celta no acudió al mismo, según cuentan los compañeros de Estadio Deportivo.

 

Ya hablamos en DB de que el Betis pretende realizar una limpieza con vistas a incorporar futbolistas en Navidades. Parece que, una vez más, el plan establecido no ha funcionado. Y todo ante los ojos de una afición que ya desespera impaciente.