Poyet recula (y traga) ante el vestuario: Rubén Castro gana la partida

El técnico del Betis, tras la polémica por su suplencia contra Osasuna, ya asume que “hay que meter a Rubén Castro en el equipo"

El delantero Rubén Castro es una ‘vaca sagrada’ en el Betis como ha demostrado el pulso que le ha echado al técnico y del que ha salido vencedor.

 

Gustavo Poyet dejó en la suplencia a Rubén Castro en el anterior partido contra Osasuna y su decisión levantó ampollas. Le han llovido críticas, pese a la victoria del equipo, y el entrenador en la posterior rueda de prensa lamentó la falta de educación de un sector de la afición bética.

 

Y ahora donde ‘dije digo, digo Diego’ y se ve obligado a poner al atacante en el equipo como sea. “Hay que meter a Rubén Castro. Hay que trabajar en la solución entre todos los jugadores, nosotros los técnicos y el propio jugador para que vuelva a aportarnos. Para eso necesitas entrenar, probar, convencerte y que se convenzan todos. Estamos buscando esa solución que por distintas razones no estaba funcionando, que nadie piense que va a ser en la izquierda", ha afirmado.

 

Poyet, además, ha capitulado en todos los sentidos y dará a Rubén Castro total libertad ofensiva en el equipo. “Es un jugador muy importante, no quiero pasar todas las semanas con la decisión el jueves y el viernes de si juega o no. Quiero estar tranquilo y convencido de que lo que estamos haciendo es en beneficio del equipo. Después son los partidos los que dictan sentencia”, ha apuntado.