James Rodríguez coloca a Isco Alarcón en al puerta de salida del Madrid
El malagueño se vino abajo tras la enésima suplencia
Isco no está para bromas. El malagueño ha encajando muy mal su no titularidad ante el Almería. El internacional español no vino al Real a calentar silla. Las caras del malagueño en el banquillo eran todo un poema. Daban para escribir un libro y sus apéndices.
La enésima suplencia de Alarcarón ha calentado al chico como pocas. Carlo Ancelotti sigue haciendo amigos en el Madrid, en concreto, con el "innegociable" Isco que se comió otro partido de Liga desde la banqueta hasta que Carletto le dio luz verde cuando la cosa ya estaba resuelta.
El desánimo de Isco tras el encuentro era de consideración. Desfiló ligero hacia la salida del Bernabéu, con caras largas, aislado de la alegría del vestuario y sin mediar palabra con Ancelotti. Su gesto lo decía todo. Alarcón se derrumbó tras el partido a ojos de una amplía mayoría del grupo que no vive ajeno al mal momento por el que atraviesa el internacional españo quien no ha encajado el descenso.
Las ausencias de los lesionados, Modric, Bale y Benzema y de los sancionados Sergio Ramos y Carvajal condicionaba el once titular y daban por sentado un plaza al andaluz en el equipo. No fue así. Como si el malagueño sufriera una sobrecarga de partidos y necesitara descanso, el italiano decidió rotar con Isco que volvió a su condición de suplente, y esta vez incluso con el equipo mermado de efectivos.
El andaluz no entendió la decisión de Carletto que sostiene que el jugador rotó para llegar fresco al tramo final de la temporada, mientras Isco argumenta que su desgaste es nulo por la ausencia de partidos completos y que, justamente, lo que necesita son 90 minutos para coger un ritmo que está perdiendo.
La imagen de ex del Málaga en el banquillo y saliendo en la segunda mitad ha hecho daño a futbolista y su entorno que intuyen que lo pero está aún por llegar. Isco ha estallado: tiene más que claro que así no seguirá.
Con el equipo restablecido el andaluz sabe que tiene la partida perdida en favor de Kroos, Modric y, muy especialmente, James Rodríguez: el colombiano volvió a jugar un partido muy completo que lo colocan varios pasos por delante de Isco en la mente de Ancelotti, grada y directiva.
El Manchester City sigue a la espera
Los galones del malagueño en el equipo brillan y brillarán por su ausencia. Sólo la salida de Carlo del Madrid y la llegad de un nuevo técnico, con nuevas ideas/dibujo podría cambiar el actual 'status quo'.
Además, en el entorno del jugador existe el convencimiento de que los 80 millones pagados por el Real Madrid por James serán una losa insalvable el próximo curso. Los fichajes de Pogba/Verratti pueden ser el final.
Isco no quiere volver a vivir otro año igual: casi siempre ha ocupado su plaza en el once por lesión/ausencia de un compañero. Esta no es la forma en que el malagueño quiere estar en el Madrid.
La opción de que se marche cuando acabe el curso, lejos de ser una utopía, es una realidad más que factible. El órdago al club es claro: así no seguirá. La Premier, Arsenal y, muy especialmente, Manchester City han llamado a su puerta: las conversaciones con el club 'citizen' son constantes y fluidas. Txiki Begiristain y Ferran Soriano, director deportivo y general de la entidad, quieren construir un nuevo City en torno a la figura del español en el medio campo. La demanda de Isco no es económica: quiero jugar, no dinero. Y en Manchester tiene asegurado lo primero y lo segundo.