Al Barça se le presenta un problema con Sergi Roberto

El canterano ha disparado su cotización y exigirá pasar de clase baja a clase alta sin hacer escala en la clase media.

La cotización de Sergi Roberto se ha disparado esta temporada. No sólo triunfa en el Barcelona en su nueva posición de lateral, sino que se ha convertido ya en imprescindible en las convocatorias de Julen Lopetegui para la selección española. Sergi Roberto es uno de los jugadores con la ficha más modesta de la plantilla. Percibe dos millones de euros y sólo Masip cobra menos que él. También es cierto que tiene una serie de bonus ligados a su participación en el juego que le permiten ingresar mucho más y que, al cumplirse, dejan de ser variables para convertirse en fijo. 

 

Sergi Roberto tiene 24 años, su contrato finaliza en 2019 y tiene una cláusula de rescisión de 30 millones que le convierte en un futbolista muy interesante para los grandes del fútbol europeo, especialmente para el Manchester City de Guardiola, que le conoce bien de su época de juvenil en la cantera del Barça. Y Sergi Roberto, que comparte representante con Busquets, que recientemente ha renovado su contrato, no muestra ninguna prisa por renovar. El hecho de ser un asiduo en las alineaciones de Luis Enrique le permite mejorar los dos millones de ficha que tiene establecidos y el tiempo juega a su favor porque a medida que avanza la temporada su cotización va en aumento y el interés de sus pretendientes crece de manera proporcional.

 

Tras el aparente desinterés de Sergio Roberto por pactar una mejora en las cantidades de su contrato se esconde la convicción de que no le será difícil encontrar acomodo en otro equipo por 30 millones de euros. Con esa baza se presentará Josep Maria Orovitg a negociar con el FC Barcelona en busca de un contrato nuevo que le sitúe entre la elite de la plantilla blaugrana, pasando directamente de clase baja a clase alta sin hacer escala en la clase media.