La convocatoria de Ödegaard desata los celos/envidias en el Madrid Castilla

En el filial blanco siguen escociendo los 'privilegios' de Martin

Así es Martin. Odegaard todavía no tenía 15 años cuando su padre recorrió media Europa exigiendo condiciones a los 26 clubes que pretendían ficharle. El muchacho, que ya había debutado con la selección de Noruega, estuvo en Múnich con Guardiola; se fue a Liverpool a comer con Coutinho; y se paseó por la Masia escuchando los elogios de los delegados del Barça. El United, el City, el Chelsea y la Juventus fueron algunos de las instituciones que se apuntaron en la lista de espera mientras su padre iba reclamando un contrato en el que le garantizaran que su hijo jugaría con el primer equipo, tal y como le habían prometido en el Madrid. Nunca en la historia del fútbol un cadete pidió tanto. Ni Messi.

 

Ahora, tras ser convocado con el primer equipo por expreso deseo de Florentino Pérez, el chico ha recupeado sus aires de divo. En el Casilla pocos son los que tragan con los humos del noruego que alardea/vacila al personal con lo de ser 'amigo' de CR7  y compañía. 

 

Zinedine Zidane piensa que el chaval de 16 años tiene mucho talento pero le pierden las formas: ha tenido varias enganchadas con sus compañeros y le molesta jugar/entrenar en el Castilla y en Segunda B.



Los palos que llegan desde el filial al chico son duros: los responsables del Castilla opinan que jugar con Ödegaard es casi equivalente a jugar con diez futbolistas en vez de once. Los piques están haciendo que sus compañeros no lo busquen en el terreno de juego. Además, estas mismas voces apuntan que el noruego no ha hecho ningún esfuerzo por entender/comprender el juego del equipo que dirige 'Zizou'. Tiene aires de estrella. De divo. Y pasa. Lo que genera que se equivoque continuamente en los automatismos del grupo lastrando al equipo.



A todo ello hay que sumar que Ödegaard no quiere entrenar con el filial más que lo justo. Demasiado poco para hacer piña con sus compañeros, para conocerles y darse a conocer. Algunas personas en el Castilla lamentan que el chico evite a sus compañeros y sólo esté interesado en estar al lado de Bale, Benzema y compañía.



100.000 euros semanales para la familia

Martin se ha convertido en un problema que ha desestabilizado el vestuario del filial, donde no ha encajado desde el primer momento. Según ha podido saber este medio uno de los grandes problemas del noruego con sus compañeros y padres de estos es el elevado sueldo de Martin: 100.000 euros semanales para jugador y familia. Cantidades que la mayoría de progenitores de los chavales del filial no ganan en tres años de trabajo.



Los críticos cuentan que Martin ha cambiado la estructura del equipo. Ha pasado de ser un acicate a un motivo de desequilibrio, tanto deportivo como económico. No se debe a la mala racha que sufre el filial con él. Es algo diferente. En el vestuario molesta el estatus de Ödegaard: tiene ficha con el Real Madrid Castilla que multiplica por mucho la del resto: 1,2 millones de euros. Esto ha generado descontento -el capitán Aguza ya protestó en Twitter por ello- envidias/celos que han lastrado la integración del chico al grupo.



Además, estas mismas voces afirman que el hecho de que el noruego entrene varios días a la semana por contrato con los 'grandes' y que se uno de los elegidos para ir a la concentración de verano sí o sí con el primer equipo, tiene a la plantilla de uñas. La última, ha sido la convocatoria para estar frente al Almería cuando hay jugadores en el Castilla que por progresión y méritos, mercerían estar en su lugar.