¿Por qué Carlo Ancelotti se decanta por James en lugar de Isco?

James Rodríguez es, ahora mismo, el jugador más en forma del Real Madrid junto con Chicharito Hernández. Su regreso ha sido capital para que el equipo vuelva a ser fiable y competitivo y está tirando del carro en el centro del campo tras la nueva lesión de Luka Modric. Lo volvió a hacer frente al Celta de Vigo en Balaídos, asentado en la posición en la que Carlo Ancelotti ha acabado acomodándole: De interior derecho. A pesar de ser zurdo realiza bien las funciones que se le asignan y suele trazar buenas diagonales hacia el centro que descolocan a las líneas defensivas rivales.

El colombiano estuvo dos meses fuera del equipo tras romperse el dedo de un pie a principios de año, en un choque en casa frente al Sevilla, partido donde también se lesionó Sergio Ramos. Sin James ni Modric, el peso del centro del campo blanco recayó sobre los pies de Isco y Toni Kroos, probablemente los dos hombres que más están acusando el cansancio en este tramo final de temporada. Se les nota menos finos que hace meses, sobre todo y muy por encima del resto al malagueño, que apenas es una sobra de lo que fue entre los meses de octubre y febrero.

Un bajón que, precisamente, no sólo le viene muy mal al equipo por todo lo que pierde sin un gran Isco sobre el terreno de juego, sino que también resta al andaluz argumentos para que el debate que le "enfrenta" a James por un sitio en el once cuando todos los efectivos de la plantilla están disponibles, algo que por otro lado puede considerarse un típico pero grave error (ambos caben perfectamente juntos en un equipo titular y las rotaciones son buenas), se resuelva a su favor.

Probablemente un tanto por ciento del bajón de Isco en estas últimas semanas se deba al 'palo' que supuso que se quedara sin sitio en partidos importantes justo cuando James volvió de su lesión. Isco ha seguido siendo titular porque James y Modric han coincidido poco hasta la recaída del croata y su vuelta a la enfermería, pero el mensaje hacia él fue que, independientemente del alto nivel que está mostrando el colombiano ahora mismo, su trabajo durante meses no ha servido para estar por delante de él en jerarquías. Isco podría haber captado que a día de hoy es suplente en el Madrid hagan lo que hagan los otros cinco futbolistas que todo el mundo recita de memoria en la alineación de gala del equipo, y debido a eso deslizó su malestar tras la victoria en el derbi europeo: No estoy contento, la competencia es grande y es bueno, pero pensaba que estaba haciendo un buen trabajo".

Es la primera vez en casi dos temporadas en la que Isco recurre a este tipo de manifestaciones en público. Un camino que le augura pocas soluciones, ya que por contra ahora mismo no puede demostrar nada por la vía del rendimiento. James no sólo está mejor que él física y mentalmente, sino que sus características benefician al juego del Madrid: El colombiano es más directo y pierde menos tiempo en la conducción que el malagueño, cuyas virtudes pasan más por el mantenimiento de la posesión y el virtuosismo técnico con la pelota en los pies. James piensa menos, pero ejecuta. 

No obstante, el estilo de ambos ha demostrado ser bueno para la plantilla y los estados de forma de los dos han ido variando a lo largo del curso. Hoy es James y mañana podría ser el de Arroyo de la Miel el que esté mejor que el otro, pero de esa competencia debe beneficiarse el colectivo, así como un grupo que dispone de dos futbolistas buenísimos y con capacidades igualmente prácticas y compatibles. Isco no está bien, como no lo ha estado en los dos últimos meses de competición, y en cambio James participa en casi todo lo que pasa sobre el césped. Ayer, en Balaídos, un gol, una asistencia, dos ocasiones de gol creadas y nueve recuperaciones. Ese es el campo de batalla donde debe moverse el '23' blanco a pesar de que sus malestares sean entendibles, no en los micrófonos.