Los movimientos de Morata a espaldas del Real Madrid
El internacional español tiene la puerta de salida entre ceja y ceja
Álvaro Morata tiene el rumbo fijado en su mente. El flamante crack del Madrid no quiere ser actor secundario. Tras salir del Santiago Bernabeú por la puerta de atrás su imposición para quedarse en él es una: ser pieza clave en el once de Zidane. El español, afirman, no va a cambiar su estatus de estrella en Italia por el rol de revulsivo.
Una realidad que choca frontalmente con los planes de Zidane. El galo ve al futbolista como un complemento único para la BBC, pero no por delante de ninguno de los miembros que la conforman. La titularidad no está asegurada. Es más, el entrenador francés anima a Morata asumir el reto de ganarse el puesto. Una propuesta que pone los pelos de punta al ‘9’.
Los cantos de sirena que llegan al jugador de la Premier no sólo le aseguran un puesto de importancia único en el equipo, si no que le mejora en muco sus actuales emolumentos como jugador blanco. Por todo, Morata asegura a sus pretendientes que sus días en el Real están contados.
El jugador presiona para que el Madrid firme una venta, en concreto al Chlesea que contentaría a las partes. Una decisión que Florentino Pérez quiere retrasar. La lesión de Cristiano Ronaldo deja en jaque al equipo para la Supercopa de Europa del 9 de agosto. El club podría acordar la participación de Morata en la competición para firmar su salida justo después.