Lo que se está cociendo (dentro y fuera del campo) en el Croacia - España

Bastante que hablar va a dar el Croacia – España de este martes, que cerrará el grupo para la Roja y determinará tanto su posición final en el cuadro como su rival en octavos de final, fase para la que ya está clasificado el equipo de Vicente del Bosque, aunque todavía sin conocer de forma exacta a su siguiente enemigo en la competición. Todo dependerá de si somos primeros o segundos, en un partido marcado no sólo por la calidad de Croacia (mermada, eso sí, sin Modric), sino también por los incidentes que los ultras balcánicos han prometido en las redes sociales.

En una lucha sin cuartel contra los máximos dirigentes de la Federación de su país, los radicales de la afición de Croacia prometen escenas similares a las que se vieron en el encuentro contra la República Checa, partido que el equipo balcánico se dejó empatar a dos goles después de ir ganando de forma clara debido al lanzamiento de bengalas desde la grada, algo que obligó a parar el encuentro. Provocar sanciones y la expulsión de la Eurocopa de Croacia está considerado como la mejor forma de hacer daño a los responsables de la Federación croata, con Suker a la cabeza.

Por eso, y aunque tanto la policía francesa como el resto de autoridades son plenamente conscientes de que este martes puede haber problemas dentro y fuera del estadio la preocupación es evidente. Con medidas de seguridad extremas, no se pudo evitar el lanzamiento de bengalas contra los Checos.

Del Bosque hará cambios

En lo plenamente deportivo también hay noticias. Vicente del Bosque medita empezar a rotar el banquillo pensando en la dureza de las eliminatorias, y se prevén al menos cuatro sustituciones (recordemos que el seleccionador repitió once en los dos primeros partidos). Bellerín supliría a Juanfran en el lateral derecho por cuestiones de descanso, San José a Ramos en defensa para evitar que el sevillano vea una amarilla que le haría perderse los octavos, Koke entraría por Cesc en una rotación natural y lo mismo sucedería entre Aduriz y Morata.

En definitiva, muchas novedades para un partido que España debe ganar o empatar para asegurarse el primer puesto y evitar así unas eliminatorias complicadas. De ser segunda todo apunta a Italia en octavos y Alemania en cuartos. Mejor un camino menos erosivo hacia la final, con Portugal con todas las papeletas para ser el rival de la Roja el próximo sábado.