El partido entre España y la República Checa dejó 'mosqueado' al madridismo

Tal y como comentábamos esta semana, casi todos los internacionales que el Real Madrid tiene repartidos por el mundo están dando un gran nivel, tanto en la Eurocopa como en la Copa América. De esto se beneficiará el Real Madrid enormemente en verano, ya que la plantilla merengue se verá revalorizada, incluyendo algunas figuras cuya imagen se había devaluado esta temporada debido a los altibajos del equipo blanco.

Sin embargo, la victoria de España ante la República Checa con un gol 'in extremis' de Gerard Piqué este lunes dejó a la parroquia merengue con un sabor agridulce. Por supuesto, el madridismo desea que gane la Roja, pero también que los madridistas del combinado nacional tengan un papel destacado. Y ahí Sergio Ramos ejerce perfectamente bien de capitán del equipo, pero cuando las cosas estaban grises para los de Vicente del Bosque en el segundo tiempo faltó la entrada de Lucas Vázquez al campo.

El seleccionador quería dar entrada a hombres que pudieran encontrar el camino del gol, ya que España dominaba pero no tenía suficientes ocasiones. Salió Aduriz por Morata, que había ido de más a menos durante el partido, y después parecía que Lucas Vázquez iba a tener su oportunidad de debutar en esta Euro. Sin embargo, el técnico optó por Pedro Rodríguez en su lugar. Prefirió la veteranía del jugador del Chelsea, que lleva mucho tiempo sin ser el que era, y dejó en el banco al futbolista más 'agitador' de los 23 seleccionados y uno de los que ha llegado en mejor forma.

Esto soliviantó a no pocos madridistas en las redes sociales. Pero, además, la noticia del choque poco resolutivo de Morata ante el gol deja malas sensaciones, ya que la Eurocopa es un escenario fundamental para que el Real Madrid encuentre las ofertas definitivas por el ariete canterano. Precisamente, Twitter también fue escenario de numerosos comentarios por parte de aficionados del Arsenal, el principal equipo interesado en Morata, que tildaron al ariete de España de 'el Giroud español'. Un mote que coloca presión sobre el '7' de la Roja.