El pacto más sorprendente entre Zidane y Florentino Pérez para la 2016-17
Entre las muchas conversaciones entre técnico y presidente blanco, destaca una por encima del resto.
Zinedine Zidane y Florentino Pérez siguen perfilando el Real Madrid de la temporada 2016-2017, que con casi total seguridad se extenderá a las dos próximas campañas. La cautelar en la sanción FIFA permitirá a los blancos fichar este verano, pero obligarán a que el club conforme una plantilla lo suficientemente potente y de garantías como para aguantar sin firmar futbolistas en las dos siguientes ventanas de mercado. Pero al margen de entradas y salidas, el mandatario también quiere dotar al club de la normalidad que le ha faltado en los últimos tiempos.
Es necesario conformar un proyecto de futuro y de garantías, donde la regularidad se instale de una vez por todas en lo deportivo y no haya vaivenes en los que el club camine siempre por la senda del alambre. En este sentido, Zizou y Pérez han pactado cuál será el gran objetivo futbolístico del próximo curso: La Liga.
Sorprende, pero no tanto. La competición doméstica no deja de ser el torneo de la regularidad, y el Real Madrid ha sufrido un paulatino decrecimiento en su rendimiento en la Liga en los últimos años. Sólo ha ganado dos de las últimas ocho ediciones, y en los últimos 26 años el balance es de 14-7 para el Barcelona. Esto a la larga podría suponer un auténtico problema histórico para la entidad, algo que Pérez se ha propuesto atajar de raíz.
El Madrid quiere volver a dominar en España, después de considerar que con la Undécima ha frenado definitivamente el ‘golpe’ del Barça en los últimos años en Europa. Incluso con cinco Ligas de Campeones en las vitrinas azulgranas y en los últimos 24 años, el Madrid ha conquistado exactamente los mismos trofeos, y mantiene la distancia en Champions de seis campeonatos más que su eterno rival, la misma que existía a principios de los noventa, cuando era de 6-0.
Así pues, la Liga será la base de las próximas temporadas del Real Madrid, si bien los merengues no renunciarán a ningún título.