La Champions juega ahora a favor del Barcelona en la lucha por la Liga

El cómodo resultado arrancado en París, con la vuelta el próximo martes, le permite centrarse un poco más en el campeonato de la regularidad que a un Madrid que no logró pasar del empate sin goles

Con las fechas en la mano, el calendario de Liga parecía hace sólo algunas semanas más favorable para los intereses del Real Madrid que para los del Barcelona. El casi tropiezo de los azulgrana el pasado fin de semana ante el Sevilla en el Sánchez Pizjjuán, cediendo un empate en un partido que llegaron a dominar por 0-2, parecía abundar en esta teoría. No obstante, la Champions podría haberle dado un vuelco a la situación. Por lo menos, momentáneamente.

 

El contundente 1-3 que arrancaron los azulgrana en la ida de los cuartos de final ante el PSG permite a los de Luis Enrique centrarse un poco más en el campeonato de la regularidad. El próximo sábado reciben a todo un hueso como en el Valencia en un horario, las 16.00, que no les resulta del todo agradable a los azulgrana, pero ya tienen los deberes de la Champions prácticamente hechos. El martes, se medirán al conjunto francés y, sin levantar del todo el pie del acelerador, dispondrán de un buen margen para enfrentarse al Espanyol en Cornellà-El Prat también en sábado y también a las cuatro de la tarde.

 

El Real Madrid, en cambio, recibe a un Málaga que ya fue capaz de dar la sorpresa en el Camp Nou con un ojo puesto en la Champions. El empate sin goles que se llevó del Calderón deja el partido de vuelta completamente abierto. El Atlético sin duda, tratará de someter a los de Ancelotti a una nueva dura prueba el próximo miércoles en el Santiago Bernabéu. En su último partido, desde luego, saltaron chispas. Y nada indica la más remota posibilidad de que pueda pasar todo lo contrario en su nuevo choque de trenes. Tras ese desgaste, los blancos viajarán a Balaídos para medirse a un Celta que no se siente del todo bien en casa, pero que podría aprovechar el estrés europeo de su rival para asestarle una puñalada.

 

Pasar a semifinales de la Champions, además, depara enfrentamientos en la Liga más duros para el Madrid que para el Barcelona. Antes de la ida, los blancos se medirían a domicilio al Sevilla, mientras los azulgrana jugarían con el Córdoba en el Nuevo Arcángel. Después, y justo antes de la vuelta, los de Luis Enrique se medirían a la Real Sociedad en el Camp Nou y los de Ancelotti recibirían al Valencia en el Bernabéu. En la penúltima jornada del campeonato, los azulgrana se enfrentarían a un Atlético de Madrid en el Calderón que, muy posiblemente, no estará demasiado por la labor de darle la Liga en bandeja a su eterno rival, si se diera el caso, y el Madrid jugaría en Cornellà-El Prat ante un Espanyol que ya le arrancó un empate en su penúltima visita al feudo blanquiazul y que le puso las cosas muy complicadas el año pasado. Y para cerrar la Liga, Barça y Madrid se medirían al Deportivo y al Getafe, respectivamente, ambos con la ventaja de jugar en casa. Algo que, no obstante, no fue suficiente para que los azulgrana se llevaran el título en 2014.