El problema del Madrid con los grandes: los partidos son 90 minutos, no 45

Como ante el Barça. El Real Madrid salió como un torbellino y se diluyó como un azucarillo. El Real se ha convertido, ante los 'grandes' como una botella de Champán de marca buena: sale con fuerza, convence al personal, pero se disipa a medida que transcurren los minutos. En el Calderón el bajón, como ante el Barça, llegó en el segundo tiempo. 

Ancelotti está acumulando críticas en este 2015 y una de las más claras es la que cuenta que el Real n funciona en la segunda mitad. El tialinao mira al frente y exige a sus hombres que la intensidad del primer acto se tralade a la totalidad del encuentro, pero la cosa no va.

Porque si en el Camp Nou sus jugadores aguantaron el tipo durante 60 minutos, en el Calderón fueron 45 minutos. No bajaron los brazos como en Barcelona, pero el frenético ritmo y la intensidad manifestada en el primer tiempo se evaporó conforme el reloj avanzaba. Los jugadores del Atlético salieron de la cueva para presionar más arriba y jugar al fútbol. Terminando el choque con el balón casi permanentemente en el área de Casillas.

“La primera parte fue fantástica, jugando muy bien, con mucha personalidad”, explicaba Ancelotti. ¿Por qué no se mantuvo un juego similar en la segunda mitad?, le preguntaron. “La segunda parte fue distinta, con un choque más igualado”, se lamentaba el italiano. Precisamente, en esta reflexión se esconde la mayor carencia del actual Real Madrid: realizar un partido completo durante 90 minutos ante un equipo grande. El pase a semifinales está en juego.