El técnico vasco que entrena (y elogia) a Chile... queriendo volver a España

La increíble historia de un entrenador que hizo las Américas para dirigir a un modesto equipo de la competición chilena, al que ha llevado a ser la revelación del campeonato

No es frecuente que los entrenadores españoles hagan las Américas. Aunque la excepción la encontramos en un donostiarra, Beñat San José, de 36 años que está triunfando en Chile con el modesto equipo del Antofagasta.

 

San José empezó en las categorías inferiores de la Real Sociedad hasta que recibió una oferta del Al-Ittihad de Arabia Saudí en 2012. Allí dirigió sus pasos para ser la revelación, conquistar la King's Cup y convertirse en el técnico más joven en ganar un título en Asia con 33 años. Siguió en Arabia y fichó por Al-Ettifag, donde estuvo hasta 2015, año en que decidió dar el salto al modesto Antofagasta chileno.

 

Y en el país sudamericano habló para ‘El Confidencial’. “La temporada ha sido histórica porque Antofagasta nunca había entrado en la liguilla. No hay que olvidar que empezamos el torneo Clausura a cuatro puntos de la salvación. Nos daban por muertos, de ahí que entrar en una liguilla para jugar el equivalente a la Europa League haya sido algo increíble. Ya salvarse fue épico, y lo digo con orgullo hacia mis jugadores. Hemos dado espectáculo, jugando un fútbol total que ha dejado a la gente muy contenta. Eso es lo que más valoro”, ha afirmado.

 

Beñat ya empieza a ser conocido. En Chile, desde luego, y en España también, en principio con su grupo de amigos en los que se encuentran Xabi Alonso o Aduriz. “He conseguido que sigan el fútbol chileno e incluso comenten los partidos de Antofagasta. Xabi, en concreto, ya es todo un experto gracias a sus charlas con Arturo Vidal en el Bayern”.

 

Las ofertas ya le han empezado a llegar, pero San José ha asegurado que “no tengo prisa por volver a España. Mi prioridad es renovar y respetar al que te ha dado la oportunidad. Ahora bien, no puedo ocultar que mi sueño romántico es entrenar algún día a la Real. Tuve la suerte de conocer el viejo Atocha gracias a mi abuelo, ver jugar a Arkonada, Gajate… Sé que trabajando las cosas se consiguen. Zubieta es mi casa, allí está mi gente. Así que si un día la Real me llama, ahí estoy yo”.