Las guerras internas en el Valencia por el nuevo entrenador apuntan a Peter Lim

Ayer martes a mediodía el nombre estaba decidido, pero no se sabía; después, por la tarde, Julen Lopetegui irrumpió con fuerza. Y ahora el ex del Oporto ya no es candidato y Pako Ayestarán, el desahuciado, vuelve a ser el favorito. Nadie sabe nada sobre el nuevo técnico del Valencia. Ese debe ser el resumen que vender a día de hoy, en vista de que parece que cada hora tenemos una novedad que contradice a la anterior. Pero sí se está en disposición de asegurar o, al menos, intuir varias cuestiones: el proceso de elección está siendo complicado, tedioso y con muchos flecos y variantes, en función de los actores implicados, que por otro lado si no rivalizan, poco les falta; y hay mucha mano interesada en que se filtren según qué cosas, para pulsar la opinión mediática y de la afición, y de paso tratar de desestabilizar.

Así de claro y rotundo se muestra deportevalenciano.com, que además enfatiza en el personaje de Jorge Mendes. Para el citado medio, Lopetegui, quien fue vendido como candidato de la cuerda del agente portugués, era simplemente un arma para desestabilizar a Peter Lim, dueño del Valencia. Según fuentes internas del club, Julen nunca fue una opción y todo se debe a una filtración de quienes pretenden hacer creer que Mendes tiene mucha mano dentro de la entidad.

A falta de una jornada para que termine el campeonato, casi nadie está ya pendiente del fútbol y el asunto del entrenador se ha convertido en la primera piedra de un verano que promete ser más que caliente en la ciudad del Turia. Lo acontecido durante la campaña ha puesto a la afición entre la espada y la pared. Mientras algunos defienden la gestión de Peter Lim, otros critican y mucho al asiático, en un conato de guerra civil entre aficionados que se extiende a todos los estamentos y procesos de la entidad, como éste del entrenador.