La sombra del "tamudazo" planea sobre el vestuario del Barça

Los jugadores del Barça dejaron patente en su comida de hermandad sólo el equipo perico podría darles un susto.

Betis en Sevilla, Espanyol en el Camp Nou, y Granada en Los Cármenes. Son los tres compromisos que le restan al FC Barcelona para finalizar la Liga y revalidar el título conquistado la temporada pasada. Ganando los tres partidos, el Barça sería campeón independientemente de lo que hagan en las tres jornadas finales el Atlético de Madrid y el Real Madrid, que sólo podrían adelantar al Barça ganando sus tres partidos y esperando un pinchazo culé.

 

Curiosamente, en el vestuario del Barça, como quedó demostrado en los comentarios que pudieron oirse en la comida de hermandad que ayer celebró la plantilla barcelonista, el partido que más preocupa es el del Espanyol en el Camp Nou. No es que los jugadores del Barça consideren más rival al equipo blanquiazul que al Betis o al Granada jugando en casa, sino que se trata de un rival incómodo que llegará muy motivado al Camp Nou empleando lo que ahora se ha venido a llamar "intensidad". Entre los jugadores del Barcelona existe mucho respeto hacia su rival local quizá por la sombra del tamudazo, cuando Barça y Madrid afrontaron la penúltima jornada de Liga 2006-07 que el Madrid tenía perdida. Los dos jugaban a la misma hora y cuando el Barça se disponía a cantar el alirón Van Nistelroy marcó en Zaragoza y Tamudo en el Camp Nou cambiando la posición de ambos equipos en la tabla y llevándose la Liga a Madrid.

 

Los jugadores del Barça son conscientes de que el Espanyol visitará el Camp Nou con el espíritu de Tamudo en la cabeza y que plantearán un partido bronco e incómodo que pondrá las cosas muy difíciles. Así respiran en este momento los jugadores del Barça en torno a sus posibilidades de ser campeones.