Hartos de Busquets en el Barça: Si paga la cláusula, que se vaya

La directiva está dispuesta a negociar una mejora de contrato, pero si se sube a la parra le abrirán la puerta de salida.

La directiva del FC Barcelona ha decidido no ceder ante las presiones de alguno de sus jugadores, que a más de uno le suenan a chantaje. Es el caso de Sergio Busquets, cuyo entorno está filtrando a los medios en los últimos días que no está contento porque quiere mejorar su contrato y la directiva le da largas.

 

Y la directiva ha decidido responder con un "preocupación cero". La junta está convencida de que Sergio Busquets está satisfecho con lo que cobra. De lo contrario no habría firmado hace 14 meses el contrato en vigor que le vincula al club hasta 2019. Nadie le obligó a firmar esas condiciones y puso su firma libremente. Ahora considera que su contrato se ha quedado desfasado y reclama un puesto entre la clase alta en el ámbito salarial del club. Bartomeu le dijo hace casi dos meses que a final de temporada revisarían su caso y hablarían, de ahí la sorpresa entre los directivos al filtrarse a los medios que Busquets no es feliz con su actual contrato y que mete prisa al club para buscar una solución.

 

No ha gustado que conociendo la situación financiera del club, Busquets presione de esta manera. Y menos que utilice a Guardiola como argumento para cambiar de aires. En la zona noble del club han encajado el desafío de Busquets con mucha firmeza: "Si no está contento con lo que firmó, que traiga los 175 millones que también él firmó como cláusula de rescisión y se vaya con su amigo Guardiola o con quien quiera". Esa es la cruda realidad, la reacción que ha producido Busquets en los despachos del club. Otra cosa es lo que se exprese de puertas afuera. Pero la procesión con Busquets va por dentro.