¿Quién lleva razón en el vestuario del Barça: Neymar o Luis Enrique?
El brasileño se volvió a enfadar tras el cambio del entrenador asturiano ante el Sevilla
Ayer volvimos a ver un nuevo capitulo que evidenció la ruptura de las relaciones entre Luis Enrique y el vestuario azulgrana. Los pesos pesados no están contentos con la gestión del asturiano, y el que más lo expresa es Neymar, que cada vez que es sustituido es un drama de gestos y murmullos.
El técnico asturiano siempre ha tenido problemas para controlar los egos de las grandes estrellas en un vestuario. Ya en la Roma se habló de una posible pelea entre él y Totti, a principios de año también tuvo una gran discusión con Messi, Luis Suárez también ha expresado su malestar en algún momento de la temporada, y ahora es Neymar el que se ha hartado.
El astro brasileño ya descansó el partido contra el Almería pensando en los importantes duelos que están por venir: Sevilla, PSG y Valencia. La MSN es clave para que el Barcelona salga victorioso de esta serie de partidos y Luis Enrique lo sabe. Neymar salió titular en el Sánchez Puzjuán y ofreció un auténtico espectáculo. Asistencia a Messi, dos caños tremendos y un golazo de falta por la misma escuadra.
Tras dos meses lejos de su mejor nivel, el brasileño mostró por fin su mejor versión en el momento más importante. Pero Luis Enrique decidió cambiarle con el 1-2 en el marcador para dar entrada a Xavi Hernández. El técnico quería más control, ¿pero era necesario quitar a Neymar tal y como estaba jugando? Con Rakitic desaparecido, Iniesta intrascendente y Suárez desacertado, quizás el '11' del Barça era el que menos merecía salir del terreno de juego.
Luis Enrique pudo haberse equivocado, pero lo cierto es que la actitud de Neymar no es propia de un profesional y menos aún de un jugador del Barcelona. El brasileño sabe que es de los jugadores más importantes del equipo y que siempre será titular en un partido importante. Es comprensible que le moleste salir del campo, pero que cada vez que sea cambiado haga esos gestos empieza a resultar algo irritante. ¿Qué pensará Pedro, que cada vez que sale se deja el alma y aún así apenas cuenta con minutos? ¿Cómo le sentó a Xavi, leyenda del club y que a Neymar le molesta tanto que entre al campo?
El enfrentamiento entre técnico y jugador está claro, aunque Luis Enrique se empeñe en desmentirlo en rueda de prensa. Ahora será el momento de saber si esta situación afectará en el vestuario culé a la hora de luchar por los títulos.