El Real Madrid sigue metiendo presión con una plácida victoria al Eibar

Real Madrid, 3 - Eibar, 0

Sin esfuerzo, en un aburrido partido especialmente en la segunda mitad, el Real Madrid superó fácilmente a un Eibar que nunca llegó con claridad a la meta de Keylor Navas. Los de Ancelotti siguen con su racha de victorias y con el objetivo del pleno absoluto en la recta final de temporada. Con goles de Cristiano Ronaldo y Chicharito en la primera mitad y Jesé en la segunda, dieron tres puntos para presionar de nuevo al Barcelona en la lucha por la Liga.

Fue el día de los suplentes. O de los no habituales en las últimas alineaciones de Carlo Ancelotti. Jesé volvía a la titularidad después de superar la lesión, y jugó en el puesto de Bale. Illarramendi también regresaba a la posición habitual de Kroos. Keylor Navas, prácticamente inadvertido en todo el partido, regresaba a la portería en su noveno partido en lo que va de temporada. Y la gran sorpresa fue la alineación de Chicharito en lugar de Benzema.

El mexicano, que venía reclamando en las últimas fechas mayor protagonismo e incluso mostró su descontento por su situación, se encontraba ante la gran oportunidad desde que llegó al club blanco. Hizo una buena primera mitad, especialmente la primera media hora, muy eléctrico, participativo, entendiéndose bien con Cristiano, e hizo un gran gol de cabeza. 

El guión del partido fue el esperado. El Eibar salió con el propósito de no llevarse un correctivo y un marcador como el de hace una semana al Granada. Tal vez por ello fueron algo más conservadores, sin tan siquiera intentar salir al contragolpe aunque los locales le dejaran el hueco. Intentaron desde el principio situarse correctamente atrás, cerrando huecos. Pero era cuestión de tiempo. El primer gol llegó de la manera más inesperada para el Bernabéu. Ya ni se acordaba la afición de la última vez que Ronaldo consiguió un gol de falta. Tras 56 lanzamiento fallidos, hoy fue el día, y en el minuto 20 de la primera el portugués botó el balón con un endiablado efecto que despistó por completo a Irureta y entró por todo el centro de la portería. Un gol más para la carrera de Cristiano en busca del pichichi y para abrir el marcador.

Desde ese momento todo fue más fácil. Los vascos se temieron lo peor, asustados al principio se rezagaron aún más. Llegaron los mejores minutos del Real Madrid y especialmente del mexicano Chicharito, los que estaba esperando. Antes del partido se arrodilló en el césped rezando pidiendo tener una buena tarde. Y así fue. Diez minutos después del primero el delantero del 'tri' remató de manera espléndida un gran centro de Arbeloa. Chicharito Hernández logró de esta manera su cuarto gol con el Real Madrid en liga pero hoy se estrenó como goleador en el Santiago Bernabéu ya que los tres anteriores fueron a domicilio.

En ese momento se acabó el partido. Algún intento antes del descanso, pero sin suerte. Como si de un pacto en el túnel de vestuarios se tratara, la segunda mitad empezó como si nada se jugaran los dos equipos. Como si no hubiera público en el Bernabéu. Los blancos pensando en sus próximos encuentros, mucho más importantes que éste y sabedores que los tres puntos estaban en el bolsillo. Los visitantes conformes con el resultado para que no fuera mayor. Tanto es así que Carlo Ancelotti hizo antes del cuarto de hora de la segunda los tres cambios, algo inusual en el técnico italiano. Dio descanso a Modric, a Marcelo y a Sergio Ramos.

Nada más iba a ocurrir, excepto el gol de Jesé en el minuto 82, tras una gran jugada personal. El canario se reivindicaba de esta manera pidiendo más protagonismo en la recta final de temporada. A buen seguro que lo tendrá. El equipo lo necesita, son muchos partidos seguidos de gran nivel, demasiados para que juegue únicamente la BBC. Lo tendrá difícil para jugar en Champions, pero en Liga es muy posible que vuelva a tener minutos.

El Real Madrid consiguió de esta manera tres puntos para seguir metiendo presión a un Barcelona que tiene un calendario mucho más complicado por delante. Ocho partidos para el final que serán ocho finales para los dos equipos. El mejor Madrid está de vuelta, aunque no sabemos si será a tiempo de recuperar el espacio perdido. 

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