El vestuario del Barça señala al culpable de la debacle
Los comentarios internos apuntan en una única dirección
Luis Enrique ha empezó el curso con el pie cambiado. La debacle en la Supercopa de España y el experimento en la alineación y cambios en la de Europa tuvo al grupo en alerta que dudó entonces en filtrar su malestar/dudas ante un Lucho que parecía distinto al del final de la pasada temporada. Unos rumores que han regresado con más fuerza que nunca en este tramo final del curso.
En la plantilla azulgrana existe el convencimiento de que el asturiano no ha demostrado aún capacidad para dominar la marcha de los partidos con cambios tácticos o de jugadores salidos del banquillo. Es más, la opinión generalizada es que cuando quiere jugar a ser técnico el equipo se resiente.
Una realidad que, según afirmó Vozpópuli, inquietaba en los despachos y, muy especialmente, en el vestuario donde hay jugadores que comentaron abiertamente que" Luis Enrique no tiene capacidad de reacción, es incapaz de cambiar el curso de los partidos".
En las últimas semanas se han producido ejemplos de ello. La entrada de Arda Turan/Mathieu frente al Villarreal desmontó al equipo. Ante el Madrid, Zidane maniató al técnico en la pizarra. Frente al Atlético, en la idea de la Champions, el Cholo se comió a Lucho en la pizarra que volvió a ser cuestionado desde dentro por los cambios en al medular, especialmente duros se mostraron algunos capo del equipo con Rafinha -por la falta de forma tras salir de una lesión- y Arda Turan.
En la vuelta en el Calderón las cosas no mejoraron. Frente a la Real, Messi y compañía hicieron llegar su malestar por al entrada en el equipo de los dos efectivos señalados. Y contra al Valencia, el asturiano no movió el banquillo cuando los signos de cansancio se dejaban ver. Tácticamente los azulgrana volvían a ser superados, esta vez por el peor Valencia del siglo.