Lo que les espera a James Rodríguez e Isco (y a otros) después del Clásico

Los dos quedaron inéditos, y están en el punto de mira. No todo iba a ser bueno para el Real Madrid en su victoria en el Camp Nou.

El Real Madrid logró ganar en el Camp Nou contra pronóstico, cierto. También obtuvo una victoria que, si bien no sirve excesivamente desde el punto de vista de la competición liguera, sí que rearma la moral del madridismo, de la plantilla y del propio Zidane, ya que los blancos iban prácticamente 'al matadero' a tenor de los análisis previos al encuentro. En mitad de una temporada más bien nefasta en cuanto a imagen y resultados, con multitud de temas extradeportivos salpicando, y en la que el Madrid no había ganado prácticamente a nadie importante hasta ahora, es una muestra de que si se lo propone puede ganar la Champions... o pelearla, al menos.

 

Pero no todo iban a ser buenas noticias. Depende de cómo se analice, Zidane fue valiente para tomar una dura decisión antes del encuentro. Como se preveía, dejó en el banquillo a James Rodríguez e Isco Alarcón, los dos mediapuntas naturales de la plantilla, en favor de Casemiro, un mediocentro recuperador y destructor del juego, para dotar de equilibrio al equipo sacrificando talento. Un talento sobre el papel, ya que tanto el malagueño como el colombiano están siendo los dos miembros de la plantilla más castigados por las críticas esta temporada. Ninguno se ha acercado a su mejor nivel, y sobre ambos pesa la sombra de una venta en verano. No haber jugado un Clásico cuando tradicionalmente el Madrid siempre contó con un futbolista de este tipo en los últimos años, y encima haber visto cómo sus compañeros demostraron que se puede ganar al Barça a domicilio y con diez hombres sin ellos, es un durísimo palo para su futuro.

 

No obstante, esa es una lectura. Otra, más positiva, puede ser el hecho de que, demostrado el hecho en sí, tanto James como Isco comprendan de una vez por todas que deben echar el resto para recuperar su sitio. Si no, y ya está confirmado, no jugarán. Habrá muchos partidos importantes de aquí al final del curso. Muchos no tendrán el mismo tipo de guión que el del sábado y requerirán de la magia de un '10', y ahí tendrán que aprovechar sus opciones. Además, su actitud tras la victoria demostró que siguen implicados con el grupo. A ambos se les vio felices por sus compañeros en las fotografías que se pudieron ver de la plantilla celebrando la victoria en redes sociales.

 

Los planes de Zidane

 

El técnico francés sabe que debe hacer rotaciones. Y que la calidad de James e Isco (y la de Danilo, que fue el otro gran sacrificado en favor de Carvajal) será necesaria para lograr la Undécima y, quién sabe, pelear por la Liga. Por eso, todos los no presentes en el Clásico trabajan duro para llegar en las mejores condiciones posibles al partido contra el Wolfsburgo de esta semana. Zidane les irá volviendo a meter poco a poco en el equipo, intentando que todos sumen cuando jueguen y que no haya altibajos entre titulares y suplentes.

 

Ni James ni Isco se librarán de la sombra de los rumores sobre su venta este verano. Venta que, no nos engañemos, podría producirse en algún caso. Pero por ahora, lo que Zidane quiere es que no se desanimen. Veremos si lo consigue.