Las preguntas sin respuesta (aún) sobre el oscurantismo del nuevo Camp Nou

Huele a 'apaño' la elección del proyecto del reforma, pero, además, se abre la gran cuestión: ¿cómo se pagará?

Se aprobó el proyecto del despacho de arquitectos japoneses Nikken Sekkei, pero ahora sale a la luz la cuestión un posible amaño en la elección.

 

Una polémica, además, que salpicaría al Colegio de Arquitectos de Cataluña y a un miembro del Ayuntamiento de Barcelona, que formaba parte del jurado que debía seleccionar el proyecto ganador.

 

Y entre estos chanchullos varios, la imagen del Barcelona por el suelo, ya que antes de la elección ‘La Vanguardia’ ya publicó quien era el ganador.

 

A partir de aquí saltan todo tipo de preguntas y especulaciones, ¿fue todo un paripé? ¿para qué se montó el numerito del jurado de ilustres, si el ‘pescado ya estaba vendido?

 

Ahora el presidente Bartomeu ha montado en cólera por la filtración, pero el cabreo del resto de estudios de arquitectura que se presentaron es notable y como hizo saber uno de ellos, Populous + Miàs + RCR Arquitectes, a la emisora ‘Catalanya Ràdio’. “Hemos ido a perder el tiempo. Esto no parece muy serio. Hemos trabajado mucho durante los últimos meses; hemos hecho maquetas, pruebas, vídeos de simulación, y lo que no puede ser es que al final se decida de esta manera”, afirmaba.

 

Pero peor han sido las posteriores explicaciones del Barcelona, al decir el directivo Jordi Moix, que ha sido “una casualidad que La Vanguardia acertase”. Además, con la desfachatez de asegurar que “no habían pedido disculpas a los tres estudios perdedores porque el club no había hecho nada malo”.

 

Al margen de esta polémica otra cuestión es cómo se pagará el coste de la remodelación del estadio de 420 millones de euros con una deuda neta de 328 millones. La planificación de este coste no está asegurada y en el aire está la pregunta de si no se pudieron 18 ‘kilos’ por Nolito, ¿se pueden más de 400 en la reforma?