Las claves del Barça: se confirma el regreso del mejor Gerard Piqué
La férrea defensa del conjunto azulgana, con el central como uno de sus máximos estandartes, es uno de los grandes argumentos del conjunto de Luis Enrique en este final de temporada
Sus primeros años en el Barça, tras su regreso a la disciplina azulgrana tras pasar algunos años en el Manchester United, fueron del todo fulgurantes. Gerard Piqué se convirtió muy pronto en una de las grandes claves del equipo que maravilló con Pep Guardiola. No obstante, tras el Mundial de 2010, su estela empezó a flojear. Tanto, que no tardaron en propagarse los rumores de que una de las condiciones de Guardiola para seguir en el banquillo barcelonista era, precisamente, darle la baja al defensa. Al final, el ex capitán dejó el club, pero a Piqué aún le costó algo más de tiempo reverdecer sus antiguos laureles. Hasta esta temporada. Ahora, vuelve a ser uno de los mejores centrales del mundo.
"Me ha entrado síndrome del futbolista", aseveró hace algunos meses. Y los números le dan la razón. En la Liga, el Barça ha sido capaz de mantener la portería a cero en 16 de los 29 encuentros que ha disputado. El chileno Claudio Bravo ha puesto su importante granito de arena desde la portería, pero la defensa también se ha mostrado como un muro inexpugnable en muchos partidos. Y ahí es donde más ha brillado Gerard Piqué. El duelo ante el Celta del pasado fin de semana es sólo una muestra más de su excelente momento de forma. Sin ser una bala, vuelve a tener velocidad y, sobre todo, anticipación. Si va al suelo, se hace con el balón. Con la retirada de Puyol, ahora tiene más galones. Y los luce con orgullo. Además, por si fuera poco, no hay muchos jugadores con su salida de balón. Algo fundamental para el Barcelona. Su nueva paternidad, el pequeño Sasha, el segundo hijo que ha tenido con la famosa cantante colombiana Shakira tras el nacimiento hace un par de años del primero, Milan, le ha sentado realmente bien al jugador.
Los inicios de la presente temporada, con todo, tampoco fueron una balsa de aceite. Su técnico, Luis Enrique, llegó a castigarle con la suplencia en algunas ocasiones. Pero, una vez hecho el correspondiente examen de conciencia, Piqué se ha propuesto y ha conseguido recuperar su mejor versión. No en vano, en lo que va de temporada ha jugado un total de 32 partidos y ha marcado seis goles, la mejor racha anotadora de su carrera. Además, está a punto de sumar su partido oficial número 300 con el Barcelona, un hito que podría completar esta misma semana, con las dos jornadas de Liga que deben disputarse durante estos días. Un hito que no está al alcance de cualquiera.