¿Cómo encajará Zinedine Zidane a Pogba en el Real Madrid 2016-2017?
Se da por hecho que el francés continuará en el banquillo blanco. Y su compatriota de la Juventus es uno de los preferidos por el técnico para reforzar el plantel la próxima temporada.
Pese a que las cosas no están yendo todo lo bien que le gustaría a Zinedine Zidane y al Real Madrid en estos dos primeros meses de andadura del entrenador francés en el banquillo del Santiago Bernabéu, son pocos los que ponen en duda el hecho de que el galo seguirá siendo el entrenador blanco la próxima campaña. Después de haber cesado fulminantemente a Rafa Benítez y de haberse visto obligado a 'gastar' el cartucho de Zizou, el técnico de futuro más esperado por el madridismo y en el que había (y hay) tantas esperanzas puestas desde hace tiempo, sería absurdo despedirle apenas cuatro meses después de haberle colocado al frente de la nave madridista.
Pero de la misma forma que se acepta su continuidad, pocos dudan de que el Real Madrid que veremos con Zidane en el curso 2016-2017 poco se parecerá al actual o, al menos, tendrá muchas piezas distintas. El francés ha heredado una plantilla llena de calidad pero también 'viciada' por las enseñanzas y los métodos de Benítez, cuya idea de juego no tiene nada que ver con la que profesa el ex Galáctico merengue. Zidane querrá imponer su toque personal a partir de junio y eso pasa por una renovación de la plantilla también prevista por la cúpula directiva desde hace tiempo. E influido por el propio Zidane, el Real vuelve a poner todo su interés en un futbolista que hasta ahora parecía descartado y olvidado: Paul Pogba.
Zidane cree que el reforzamiento de su idea de fútbol y la base para terminar de consolidar el Real Madrid que quiere para el futuro es rearmar, y mucho, el centro del campo. Consciente de que la actual medular está conformada por centrocampistas que en su mayoría son mediapuntas reconvertidos como James, Isco o el propio Modric, ahora especialista e indiscutible director de orquesta, cree que su compatriota es de lo poco que hay en el mercado que puede ofrecer alternativas diferentes para que el Madrid pueda conseguir algo que lleva persiguiendo mucho tiempo: la consistencia en la posesión del esférico y el toque sin altibajos. El '10' de la Juventus es uno de esos denominados 'centrocampistas totales' cuyas condiciones físicas y técnicas le convierten en una de las pocas figuras susceptibles de poder jugar en casi cualquier equipo.
Ahora bien: ¿Cómo encajará Zinedine Zidane a un hombre como Paul Pogba en el Real Madrid, si es que finalmente el club blanco consigue arrebatárselo a la Juve? Necesariamente, uno de los actuales titulares del equipo tendrá que dejar de serlo. El actual sistema de 4-3-3 que maneja el Real Madrid está condicionado por la titularidad indiscutible -y hasta cierto punto lógica- de la BBC. Bale, Benzema y Cristiano Ronaldo acaparan tres de las seis posiciones por delante de la defensa, de modo que una terna de hasta seis hombres se juegan tres puestos cada miércoles y cada domingo: Casemiro, Kroos, Modric, Kovacic, James e Isco. De esos seis nombres, sólo Casemiro, Kroos, Kovacic y quizá Modric (el mejor juego de su carrera ha llegado en el Madrid tras el retraso de su posición natural de mediapunta) son centrocampistas puros. Descartando al brasileño, que apenas juega ya con Zidane, Pogba se 'enfrentaría deportivamente a los dos croatas y al alemán por un puesto.
Teóricamente, la BBC podría ser 'descabezada' la próxima temporada, precisamente para reforzar el centro del campo con un futbolista más, tal y como pretende Zidane. Si esto fuera así, por jerarquías, seguramente Kovacic sería el gran damnificado junto con los dos mediapuntas puros de la plantilla, Isco y James. Estos tres jugadores tendrían que sudar la camiseta para poder ser de la partida en el once inicial junto a Pogba, Modric, Kroos y uno de ellos a elegir. Pero, por otro lado, hay que tener en cuenta el coste del francés. El fichaje de Pogba podría salirle al Real Madrid por unos 80 millones de Euros, cifra que seguramente obligaría a vender a alguna de las estrellas del plantel merengue, bien sea uno de los medios, bien un miembro de la BBC.
El otro gran perjudicado en el sentido de no tener tan asegurada su titularidad sería Kroos. El alemán, que ha alternado rachas de gran fútbol con etapas en las que ha estado bastante por debajo de su nivel en sus dos temporadas en el Real Madrid, se vería afectado por su poca capacidad física en comparación con el recorrido de Pogba, que se compenetraría perfectamente con el mando de Modric y el virtuosismo de James o Isco enganchando con la BBC, si es que esta no se deshace.
La posición de Pogba. A todo esto, para terminar, habría que añadir un componente meramente táctico pero igualmente apasionante para Zidane como entrenador. Pogba no es un centrocampista recuperador, ni mucho menos. La principal debilidad de este Real Madrid se basa en su incapacidad para robar esféricos en su fase de repliegue defensivo y presionar con acierto la salida de balón rival. No tiene especialistas en este sentido y, por tanto, cuando los contrarios manejan la posesión, los blancos sufren demasiado. Fichando a Pogba para este cometido habría que llevar a cabo una labor de 'reeducación' con el francés, que en realidad es un hombre de perfil atacante y llegador por potencia física, no exento de una gran calidad. No es un pivote defensivo, labor con la que, se intuye, Zizou le quiere en la plantilla. Entre otras cosas porque ya tiene 'llegadores', como son el colombiano y el malagueño.
Kroos, Isco, James y Kovacic. En resumen, un culebrón interesante por delante y un reto para Zidane, que ve en su compatriota la mejor opción para imponer su idea de fútbol en un club en el que su mano, su voz y su voto no es ni mucho menos el de cualquiera.