Zidane pone paz en un viejo pulso dentro del vestuario del Madrid
El francés está sirviendo de mediador y figura ejemplar para calmar a todos los estamentos de la entidad
El 'efecto Zidane' se medirá este miércoles en Roma, pero su impacto dentro del Real Madrid es absolutamente indiscutible. Tanto en resultados -quizá no tan diferentes a los que cosechó Rafa Benítez en sus primeras semanas como entrenador blanco- como en juego, este sí, bastante más atractivo para el espectador que el que se desarrollaba con el madrileño. Pero también en cuanto a tranquilidad dentro del club y del vestuario. Las paredes que acogían a los 26 futbolistas en Valdebebas habían sido escenario de numerosos 'polvorines' durante los primeros meses del curso, y ahora todo eso casi ha desaparecido.
Porque, al contrario que Benítez, Zidane es un hombre que despierta afecto en los demás. Que genera empatía. Así lo asegura el discurso del vestuario cuando opina sobre sus métodos y su forma de tratar con los futbolistas. No sólo por su pasado como ex jugador y ex leyenda futbolística, que también, sino por su capacidad de entendinmiento de cómo piensa y qué necesita un crack en un vestuario tan complejo como el del Madrid, en el que él fue parte activa durante años.
Y esta cualidad, la de tener experiencia no como técnico, sí como 'psicólogo' de estrellas, se ha puesto en práctica varias veces últimamente, y no solo con los propios jugadores. Algunas voces apuntan también a la zona noble del club. Sabido es que el presidente Florentino Pérez no atraviesa el mejor momento de su relación con los dos 'capos' del vestuario merengue, Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo. Las diferencias entre ambas partes se han ido fraguando con el paso del tiempo, basándose en determinadas decisiones institucionales con las que los futbolistas no estuvieron de acuerdo, y contestadas con una actitud que el club considera no acorde a la de dos miembros tan importantes de la plantilla.
Según vozpópuli, esta relación entre Ramos, Cristiano y Pérez, que como decimos está muy deteriorada, se ha visto calmada por la entrada en escena de Zidane. Al ser hombre de confianza tanto del mandatario merengue como del vestuario, el galo ha sabido mediar entre las partes y hacer que olviden sus recientes rencillas, que a punto estuvieron de dar con el luso fuera de la entidad el pasado curso y también con la salida del sevillano, algo que aún no es descartable en un futuro pese a que renovó la temporada pasada con el Madrid.
Cuenta el citado medio, además, que la preferencia de Zizou por alinear a Ramos junto a Varane en la parcela defensiva ha provocado un distanciamiento del vestuario (o parte de él) con Pepe, señalado, además, por ser el 'topo' de Florentino, otro problema que se mantiene en 'standby' por la presencia del técnico. Lo que no podrá esperar mucho más es la resolución del tema médico, ya que Zidane se ha posicionado con los jugadores en torno a su cruzada contra Jesús Olmo, al cual sólo le queda el apoyo del club.