Zidane imparte una clase magistral al vestuario del Madrid sobre el Barça

Zidane toma el mando. El técnico galo está inoculando a sus pupilos una idea mayor: lo mejor del Barça ya se vio. Ahora llega el declive. Una clase magistral que pivota en puntos clave para asaltar la Liga y rivalizar con los azulgrana sin miedos en la lucha por hacerse con la Champions.

Zinedine ha marcado a la plantilla el Clásico del próximo abril en el calendario por mucho más que los tres puntos: Zidane trabaja con la vista puesta en el día a día y un ojo en el encuentro ante el equipo de Luis Enrique: vencer y convencer sería el mejor respaldo para su persona. Además, la ambición en el Madrid va más allá de la victoria: el objetivo es mandar al Barça a la lona. Una victoria sonrojante que haga saltar la banca de un equipo, explican desde el Real, que empezará a vivir en el alambre desde ya por el desgaste físico. Mantener el nivel de exigencia en la segunda vuelta será un imposible que en el Real miden con tino.

‘Zizou’ apunta una idea: este Barça, lejos de meter miedo, infunde respeto, pero se sabe varios peldaños por debajo del once que encadenó el triplete en la segunda vuelta del pasado curso. El galo cuenta con un fondo de armario mayor/mejor que le permite vencer sin ir a gas a fondo, ni quemar al equipo. Además, estar eliminado de la Copa descarga al grupo de un esfuerzo mayor para centrarse en los dos grandes: Liga/Champions.

Una realidad que el Barcelona ha vivido y vive a la inversa: el once tipo azulgrana se recita de memoria. En el Madrid existe el convencimiento que ante un rival de altura el equipo de Luis Enrique puede resquebrajarse hasta el punto de evidenciar sus verdaderas carencias. Llegar a abril sin ceder un punto para dar el golpe de gracia en el Camp Nou. Una derrota amplia que meta el miedo en el cuerpo culé para asaltar el campeonato.