El dato que el Madrid tendrá que 'ocultar' para vender a un CR7 en las últimas

Una vez más, el partido de Cristiano Ronaldo ante el Betis fue malo y reflejó el mal momento que está viviendo el portugués en su carrera

El Real Madrid falló en su primera salida del curso en la 'era Zidane', y el castillo que se había construido en torno a la figura del técnico francés en cuanto a ilusión y pensamientos positivos para esta segunda vuelta empezó a agrietarse. Después de dos goleadas en casa ante rivales definitivamente asequibles como Deportivo y Sporting, y empatando en casa de uno de los equipos que peor lo está pasando, tanto como local como para mantenerse a flote en Primera División, queda el poso de que los choques lejos del calor del Bernabéu serán un tiro al aire, un 'parto' tremendo de aquí al final de la temporada. Un síntoma de que, de momento, el francés no ha dado con la tecla de la confianza y la regularidad de sus jugadores.

 

Y buena parte de la 'culpa' del empate en el Villamarín la tuvo Cristiano Ronaldo. Por supuesto no fue el único culpable ni mucho menos, pero de sus botas salieron algunas de las ocasiones más claras que el Real Madrid perdonó durante uno de tantos partidos que se llevan viendo de los blancos en los últimos años. ¿La diferencia? Que antes marcaba esos goles que ahora falla de forma estrepitosa, lo que hace que el equipo no cuente con sus tantos y, por ende, que sufra problemas de pegada. Sí, han leído bien... problemas de pegada en un equipo que llevaba 10 tantos marcados en dos choques con Zidane sentado en el banquillo.

 

¿Cómo es eso posible? ¿Es, acaso, una contradicción? Para nada. Existen datos que lo corroboran, aunque para visualizarlos haya que bucear. El periodista Pedro Martín, de la cadena COPE, dejaba esta interesante reflexión este domingo, después de lo visto en Sevilla: sus estadísticas reflejan a las claras el gran problema que está teniendo el Real Madrid con Cristiano Ronaldo en los últimos tiempos.

 

 

¿Qué demuestra este brutal dato? Que los goles de Cristiano, aparte de que son menos, si bien siguen siendo un gran número nada desdeñable, ya no son trascendentes, no son determinantes. Cada vez es más habitual ver al portugués marcar los últimos tantos de goleadas sencillas, el cuarto, el quinto... incluso maquillando sus estadísticas con goles de penalti. Por supuesto que también valen, pero no como antes, y menos viniendo de un jugador que ha sido tan capital, tan fundamental para el club en cuanto a rendimiento y resultados en los últimos siete años. Se nota, por supuesto.

 

Así mismo, este Madrid, que se atasca en encuentros lejos de casa cuando las cosas no empiezan saliendo de cara, es un equipo tremendamente goleador cuando empieza ganando y los choques se ponen 'sencillos' muy pronto. Esto contribuye a que no se acabe de ver el problema de fondo de la pegada.

 

Una falta de puntería, la de un Cristiano que erró ante Adán de forma estrepitosa en la primera mitad, y que mandó un balón fuera por poco que hubiese supuesto un 1-2 al final del encuentro en la segunda, que el Madrid tendrá que maquillar bien si finalmente toma la decisión de acometer la venta del astro portugués al final del curso. Si es que se obtiene la cautelar de la sanción FIFA...