La traición que está cocinando Nolito a espaldas de Luis Enrique

Mientras Luis Enrique se mantiene firme en sus trece de que quiere a Nolito como refuerzo del mercado de invierno, y nadie más, el jugador no parece mostrar el mismo entusiasmo que su ex entrenador. Los presidentes Bartomeu y Mouriño siguen negociando, pero un escollo insalvable frena la operación que debería llevar a Nolito del Celta al Barça. El club gallego se cierra en banda: si el Barça quiere a Nolito, que pague los 18 millones de su cláusula de rescisión de forma inmediata y se lo lleve. En caso contrario, no hay operación. Y la respuesta del Barça no es satisfactoria, dado que Bartomeu quiere evitar gastar un sólo euro en fichajes en este momento, posponiendo el pago al mes de julio. Bartomeu quiere una cesión hasta junio con opción de compra que se haría efectiva en ese fecha.

Y mientras los dirigentes negocian y Luis Enrique reclama, Nolito, que ha estado parado en las últimas semanas a causa de una lesión, sopesa la posibilidad de reaparecer ante el Atlético en Copa esta semana, lo que le impediría jugar con el Barça la competición copera. Nolito se lesionó el 12 de diciembre. Rotura fibrilar. Se le diagnosticaron cuatro semanas de baja y ya lleva seis. En Vigo nadie duda de que Nolito lleva dos semanas alargando el plazo a la espera de que se consume su fichaje por el Barça. Pero éste no llega y ya tiene ganas de volver a jugar.

Para Luis Enrique supondría un revés importante, ya que cuenta con el delantero andaluz como recambio en las rotaciones para las semifinales de la Copa del Rey. Nolito entiende que debe vivir el presente sin condicionarlo a su futuro y está dispuesto a alinearse con el Celta en la Copa, lo que Bartomeu entendería como una provocación y un argumento más para desestimar su fichaje.