El dolor de cabeza de la directiva azulgrana está en la cantera

El Barça tiene estropeado el ascensor entre el fútbol base y el primer equipo.

Eusebio Sacristán lo avisó antes de marcharse y Jordi Roura lo comprobó después, el Barça B tenía un grupo muy mimado. El Filial azulgrana no levanta la cabeza desde que se marchara el ahora técnico de la Real Sociedad. Primero fue el descenso a Segunda B pese a contar en el equipo con jugadores como Alen Halilovic, Samper o Sandro y esta temporada todavía es peor el asunto.

 

El filial se encuentra en puestos de descenso en el grupo tercero de Segunda B, a tres puntos de la salvación. La llegada de Gerard López al banquillo no ha sido solución para nada y la directiva no sabe bien qué hacer con un equipo que pese al talento que acumula es un agujero negro dentro del club. Por el momento se harán varios fichajes para el mercado invernal para intentar mantener la categoría, aunque podría no ser algo prioritario.

 

De hecho, fuentes cercanas a la directiva preferirían que el equipo bajara de categoría a Tercera División y hacer una limpia de jugadores y volver a empezar la rueda que comenzó Pep Guardiola con el ascenso de Tercera a Segunda B. Ya que consideran que los jugadores de la cantera al verse ya en Segunda División, pese a sus beneficios competitivos, acaba 'malcriando' a los jóvenes proyectos azulgranas, quienes reciben un foco mediático muy grande para chicos que apenas tienen la mayoría de edad.